El último día de junio la dirigencia local: gremios y honorables concejales de Cúcuta se reunieron en el recinto del Concejo muy angustiados por el sopor existencial que nos posee y pretextaron como catarsis o liberación de las malas emociones y situaciones cotidianas, un foro que llamaron ¡“No aguantamos más”!
Recordé un día de estrés y la llegada a la casa en que advertía no tolerar molestias y sentenciando ¡estoy que no me aguanto la camisa! Desde la sala de televisión un vocecita dulce y fuerte, la de una nieta, respondió sin mirarme siquiera: ¡“pues quítesela abue”! y me dejó lelo.
Yo creo que después del foro no aguantamos más, la dirigencia convocada y reunida nos dejó ¡lelos! Sí, porque uno se reúne con otros para enfrentar la crisis y lo menos que se imagina es que quienes lideren o quien lidere, se va a revestir de los poderes que le puede otorgar una comunidad para superarla, que quien lidere tenga competencia para afrontarla, que disponga de estrategias preconcebidas para derrotarla, pero sobretodo que tenga visión cronogramada del proceso para realizarla.
La noticia leída en este diario, nos comunicó tal cual, como dice el personaje del boletín del consumidor, lo siguiente: que conformaron otro frente común para combatir la crisis social y económica atribuida a diez meses de cierre de la frontera, que asistieron los mismos gremios como Cámara de Comercio, Fenalco, Camacol e Induarcilla. Que Víctor Fidel Suárez llamó la atención por la ausencia, la enésima vez, de la clase política con excepción de Corzo Román, que descubrieron otra vez que la ciudad de Cúcuta lidera el desempleo y la informalidad en el país con el 16.2 y el 70% respectivamente (sic), que redescubrieron, otra vez, que por razones de pobreza la ciudad ocupa el puesto 15 entre 23, que el doctor Luna y Gladys Navarro coincidieron otra vez en que la situación es caótica en materia económica y debemos hacer una alianza para salir del caos¿? (sic), que Nelson Ovalles demandó mayor gestión y aporte de los gremios empobrecidos, que Juan Capacho protestó porque Juan Manuel Santos se olvidó de Cúcuta (s
ic), que Oliverio Castellanos- mi paisano- preguntó ¿cómo garantizar a los empresarios que producen textiles ¿?, calzado y lo relacionado con las confecciones, que tengan un comercio a nivel internacional, con una frontera cerrada?
¿Soluciones y propuestas? La noticia nos informó que en ese foro de ¡No aguantamos más!, los líderes gremiales y los honorables concejales, propusieron las siguientes soluciones: Decretar la quinta emergencia económica, trabajar en equipo para buscar alternativas de solución, porque de lo contrario exponemos a los desempleados a entrar a la delincuencia (sic), otro plan de choque para la generación de empleo, volver a solicitar la exoneración del IVA para la temporada de Navidad y seguramente un mes más, reabrir la frontera (sic).
Hubo una sola voz de realismo. La de Darwin Clavijo secretario de Hacienda Municipal. La ciudad debe industrializarse, pero eso no será en el corto sino en el mediano y en el largo plazo. Quitar el IVA por dos o tres meses tampoco es solución para la crisis, sino estructurando grandes proyectos para jalonar con el Gobierno Nacional.
Desde esta columna advertí, que antes de diciembre de 2016 tendríamos otra emergencia económica y social y no hemos preparado un solo documento serio para el desarrollo de ese Decreto. Y el Artículo 215 vuelve al presidente Santos como a la santísima Trinidad, que todo lo puede. Cáspita, aprovechemos ahora sí, la quinta Emergencia.