Con la voz entrecortada, ayer la mamá de Richard Alexander Tejado Ramos seguía sin entender cuál habría sido el motivo para que asesinaran a su hijo junto con un menor de edad que lo acompañaba el miércoles, a las 5:30 de la tarde, en un callejón ubicado entre las calles 21 y 22 con avenidas 4 y 5, del barrio El Salado parte baja.

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Este doble homicidio conmocionó a los habitantes de ese sector que está pegado al barrio Metrópolis, en el norte de Cúcuta.

Una vez se conoció del hecho, poco a poco fueron llegando más patrullas de la Policía a conocer detalles de lo ocurrido. La comunidad estaba inquieta, los personas hablaban unas con otras tratando de conocer más detalles del suceso, pero como todo se dio en una zona de difícil acceso y boscosa, no tenían mucha información.

“Yo estaba viendo televisión cuando escuché varios tiros, pero lo que creí es que eran unos golpes de tejas de zinc, al rato es que veo la Policía y una de las personas me dice que dos hombres fueron asesinados”, comentó uno de los habitantes de la zona.

También hubo residentes de este lugar que señalaron que minutos antes de escucharse los disparos, alcanzaron a oír como una discusión entre varios hombres.

Una trágica noticia

Sin embargo, para la madre de Richard Tejado, quien se enteró de la muerte de su hijo a las 9:00 de la noche, los hechos todavía son muy confusos, porque lo último que supo es que el joven, de 19 años, llevaba poco minutos de haber salido de su vivienda.

“Vino a buscarlo un amigo (la otra víctima) para salir un rato al barrio, por lo general mi hijo se la pasaba era durmiendo en las tardes, porque salía muy temprano a trabajar, pero salió y al rato fue que lo mataron. El lugar en el que los asesinaron era un paso rápido hacia Metrópolis y lo que creemos es que iban a visitar a su hermano que viven en ese barrio, porque ya lo habían hecho antes”, dijo la mamá de Tejado Ramos.

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Según la mujer, Richard había llegado del estado Aragua, en Venezuela, hacía 5 años y desde entonces vivía en El Salado y trabajaba en la Central de Abastos de Cúcuta.

“A penas llegó a Cúcuta se puso a trabajar en Cenabastos en la zona donde venden pescados, todos los días se levantaba muy temprano, llegaba allá a las 3:00 de la mañana y regresaba como a las 2:00 o 3:00 de la tarde. Era un trabajo pesado, pero él (Richard) siempre fue un buen trabajador, su amiguito (la otra víctima) también trabajaba allá”, manifestó la angustiada madre.

Al parecer, los dos jóvenes eran muy unidos y en ocasiones hasta iban juntos hacia Cenabastos a pie, para trabajar, pasando por ese sendero en el que serían asesinados a bala por desconocidos.

La hipótesis de la Policía

Los motivos del doble homicidio hasta ahora no han sido establecidos por las autoridades, sin embargo, la comunidad les alcanzó a dar información sobre momentos previos a que se escucharan los disparos en ese lugar.

Según los vecinos, a pesar de que el lugar es considerado como un pasadizo entre ambos barrios, muy poca gente lo utiliza porque por lo general es frecuentado por drogadictos.

Y sumado a esto, las autoridades conocieron que minutos antes del hecho oyeron a varias personas discutir en ese punto del barrio.

Sin embargo, La Opinión visitó a las viviendas cercanas a este sendero, pero los habitantes aseguraron que no tenían conocimiento del doble asesinato porque se encontraban trabajando y no habían llegado a sus residencias.

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