
Una bala cegó la vida de Eider Daniel Rangel Saenz, el joven colombiano de 23 años, cuyos restos fueron encontrados en una fosa común de Ureña, el 4 de mayo pasado. Eso dice el acta de defunción entregada este lunes, donde se establece como causa de muerte una herida por arma de fuego.
Por sus restos sólo esperaba una joven, madre de su pequeña hija; Eider dejó una niña que ahora tiene 9 meses de nacida. Su padre nunca la conoció, pero su ADN fue la clave para establecer la identidad póstuma.
Otros siete cuerpos aún no han sido identificados, y tal vez nunca lo sean, pues no coincidieron con las muestras aportadas por cerca de medio centenar de familias que al momento de su hallazgo se acercaron para facilitar a las autoridades venezolanas placas dentales, fotografías y muestras de ADN en un desesperado intento por obtener respuestas ante la desaparición de sus seres queridos. Para ellos la espera continúa.
Palabra cumplida
Tal como lo habían anunciado las autoridades venezolanas, este lunes 20 de Julio fueron entregados los restos de Eider Rangel, y también los de otros 5 jóvenes, todos venezolanos, identificados por las autoridades como Brayan Duran Carrero, de 19; Sergio Parra Valderrama, de 16; Luis Maldonado Estupiñán, de 17; Nelson Sandoval Suárez, de 20, y Edder Valbuena Guerrero de 16.
Entre lágrimas, los deudos fueron recibiendo junto al acta de defunción, una pequeña urna contentiva de los despojos mortales de sus seres queridos, hallados el pasado 4 de mayo en tres fosas comunes, en el sector Los Tanques, vía a La Mulata, en el municipio Pedro María Ureña, en la frontera colombo-venezolana.
El acto se cumplió en la morgue del Hospital Central de San Cristóbal, cuyos accesos fueron cerrados y custodiados por funcionarios de la Policía Nacional durante toda la jornada, hasta tanto se cumpliera el protocolo de entrega de las osamentas a las familias.
Ello finalmente tuvo lugar cerca de las 3:00 de la tarde, tras una larga espera y sin más ceremonia que el papeleo oficial, con el cual se deja atrás la incertidumbre de varios meses de angustiosa búsqueda por parte de esposas, madres y hermanos.
En este caso actuaron la Fiscal Nacional Segunda, Greidy Duque; Fiscal Superior del estado Táchira, Yanis Carolina Domínguez; la Fiscal Octava, MarinésArtaona de San Antonio; Fiscal de Derechos Fundamentales del estado Táchira,Marelbys Mejía y una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, encargada del manejo de las seis osamentas.
La cónsul general de Colombia en San Cristóbal, Cecilia Palacios Torrado, junto a funcionarios de esa dependencia consular, fueron las primeras autoridades colombianas en recibir los restos de Eider Rangel, para inmediatamente hacer entrega de los mismos a su familia.
Trasladados
Los restos de Eider Daniel fueron trasladados hasta el Consulado de Colombia en San Antonio y de allí al puente internacional Simón Bolívar de la misma localidad, para ser entregados formalmente a las autoridades de Migración Colombia por parte del Ministerio Público venezolano.
La Oficina de Ayuda Humanitaria de Migración dispondrá lo necesario para apoyar a la familia de Eider Daniel Rangel Saenz en lo relacionado con el sepelio de sus restos mortales.
En lo que respecta al resto de las víctimas, las osamentas fueron trasladadas hasta la población de Ureña en un vehículo oficial, seguidos de cerca por sus familiares; para posteriormente proceder a sus exequias, por cuanto todos residían en la mencionada población fronteriza.