Los pequeños productores del campo tienen un aliado fundamental para impulsar sus cosechas. La Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (Agrosavia) viene desarrollando en distintos frentes una ardua labor, para que los campesinos del Catatumbo y de otras zonas del departamento mejoren sus técnicas, a través de la tecnología.

La institución tiene 13 centros de investigación y 12 sedes, uno de ellos es La Suiza, ubicado en Rionegro (Santander), con su sede adscrita en Cúcuta, desde donde se busca contribuir con el cambio técnico del sector agropecuario, para mejorar la productividad y competitividad de los productores. 

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De acuerdo con Diego Alejandro Zárate Caicedo, director regional de Agrosavia, la entidad trabaja  en la formulación e implementación de proyectos de investigación, desarrollo e innovación para transformar al campo y mejorar la calidad de vida de los agricultores de Norte de Santander.

Zárate informó que una de las apuestas es el cacao en los municipios PDET, por eso apoyan a 360 cultivadores de Convención, Sardinata, Tibú, Teorama, en la subregión del Catatumbo; un proyecto financiado con recursos del Fondo Ambiental de Portugal. 

“Estamos trabajando en la mejora de la sostenibilidad del cultivo, con cuatro enfoques: transferencia de conocimiento, es decir, la capacitación de los productores a través de vitrinas tecnológicas; la consolidación de modelos de sistemas agroforestales, que buscan aumentar la productividad a través de un manejo sostenible integral; la poscosecha, por eso vamos a entregar una planta multipropósito, que, además de enfocarse en la fermentación, aborda la agricultura familiar, usa la energía que se produce en el secado para otras estrategias como la cocción de alimentos o la deshidratación de los mismos”.

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El funcionario explicó que el cuarto enfoque es la rehabilitación, de la mano de Fedecacao, de 100 hectáreas de cultivos. Para ello entregarán nuevas variedades de semilla de alta calidad, para hacer el producto más competitivo. El propósito es beneficiar en total a más de 1.000 campesinos.

Rescate de cebolla ocañera  

Diego Alejandro Zárate afirmó que Agrosavia promueve el rescate de la cebolla ocañera, desplazada por la peruana y el contrabando, mediante un proyecto financiado con recursos del Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación del Sistema General del Regalías y el respaldo de las gobernaciones de Norte de Santander y Santander. La meta es reposicionar este rubro como “producto de origen regional y que sirva al país como identidad nortesantaderana”.

“Estamos, para eso, en labores de limpieza de semilla y en el rescate de producción de material vegetal. Son 850 productores beneficiados de siete municipios: San Calixto, Teorama, La Playa, Ábrego. El Carmen, Villacaro y Ocaña”.

El proyecto se basa en la valoración de la cadena de suministro a partir de la integración de los resultados de caracterización biofísica, técnica y socioeconómica de los sistemas productivos de cebolla de bulbo, la evaluación de  genotipos, la generación de tecnologías de producción de semilla prebásica de cebolla de bulbo y la implementación de procesos de formación de talento humano. 

Una mano a los papicultores

El director regional de Agrosavia destacó que, con el apoyo de las gobernaciones del Norte de Santander y Santander, igualmente con recursos del Fondo de Ciencia, Tecnología e Innovación del Sistema General del Regalías, tecnifican los cultivos de papa de año y criolla. En el departamento se trabaja en Chitaga, Cácota, Mutiscua y Pamplona, beneficiando a 378 familias papicultoras.

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“Es una apuesta en materiales genéticos potenciales, para que se incremente la productividad, con propiedades más competitivas semejantes a Cundinamarca y Boyacá. Queremos hacer unas pruebas de evaluación agronómica, ampliar la el área de producción y entregarle a Norte de Santander una nueva variedad de papa registrada”, añadió.

Dotarán a los productores de las zonas con viveros para la producción de estos tubérculos y de semillas certificadas y de innovadoras lavadoras que usen energía solar o diésel, para garantizar que funcionen si no hay electricidad, las cuales también reducirán el uso del agua. Aunado a esto, hay una etapa de capacitación con 40 parcelas o vitrinas tecnológicas con siembra de papa, gracias también al respaldo de Fedepapa y la Universidad de Pamplona.

Apoyo a otros sectores

Otra iniciativa se desarrolló en Tibú con la palma de aceite, frente a la alta incidencia de la enfermedad de pudrición del cogollo, con el fin de apoyar a 50 palmicultores. Igualmente, implementaron un proyecto en la cadena panelera en Convención, Sardinata, Arboledas, Cucutilla, Chinacota, Gramalote, Labateca, Lourdes, Ragonvalia, Salazar de las Palmas, Santiago y Toledo.

Agrosavia ha entregado, por medio del Plan Semilla, a diferentes agricultores plántulas de cacao y aguacate. Así mismo, ha apoyado a la comunidad indígena Motilón Barí en el manejo de sus semillas nativas, mediante el uso de nuevas técnicas y tecnologías.

Diego Alejandro Zárate concluyó que Agrosavia no ha dejado de lado el campo de Norte de Santander, pues ha trabajado con Asozulia en el distrito de riego, en beneficio de los arroceros para brindar alternativas de siembra de acuerdo con las condiciones agroclimáticas y sociales de la zona; también con los cultivadores de cítricos y de durazno, entre otros.

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