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El camino de la reelección
Para un presidente reelegirse en Colombia no es un tema tan complicado, finálmente el poder del     ejecutivo es tan grande y excesivo en el país que la reelección resulta ser un camino relativamente fácil. Para la muestra está que a un año de la elección no ha aparecido ningún candidato con la fuerza o posibilidad suficiente de enfrentar a Santos.
Sábado, 18 de Mayo de 2013
Para un presidente reelegirse en Colombia no es un tema tan complicado, finálmente el poder del     ejecutivo es tan grande y excesivo en el país que la reelección resulta ser un camino relativamente fácil. Para la muestra está que a un año de la elección no ha aparecido ningún candidato con la fuerza o posibilidad suficiente de enfrentar a Santos. Por pura casualidad del destino el candidato quehasta el momento ha iniciado campaña es de Cúcuta, David Corredor, en un ejercicio de democracia pero sin la fuerza o presencia a nivel nacional que le den una posibilidad. Pero Juan Manuel Santos resultará reelegido así haya paz o los acuerdos de la Habana finálmente no terminen en nada. En algo  le han servido para su imagen, o para su campaña, las 100 mil casas que se están construyendo, sin que incidan de manera definitiva puntos oscuros del mandato de JMS como la creciente inseguridad que lamentablemente cada día se toma más a las ciudades en el país.

El camino de la reelección presidencial relativamente es tan fácil que incluso las elecciones terminan siendo hasta aburridas, porque se trata de una contienda en la que casi no hay sino un sólo candidato,  en la práctica y en el mundo de las realidades, casi que sin contendor. Uribe ha hecho lo imposible para tratar de encontrar un candidato con alguna opción de enfrentar a JMS, tratando el expresidente de plantearle esa posibilidad al procurador general de la nación, quien finálmente analizó esa alternativa, la sopesó, y no aceptó. Tampoco tomaron fuerza ninguno de los candidatos incondicionales de Uribe,  porque al final quien tiene el reconocimiento y por quien la gente estaría dispuesta a votar, es por él, por Uribe, pero no por el candidato que el expresidente postule. Deberá estarse lamentando aún Uribe del fallo de la Corte Constitucional que le cerró el paso a cualquier reelección. Hoy en día cualquier  colombiano puede llegar a la casa de Nariño, menos Uribe, porque la reelección sólo se permite una
sola vez. Por ello para el expresidente quizás lo único que le gustaría que resultara de la Habana, es que los diálogos terminen con la posibilidad de la convocatoria de una asamblea constituyente, porque ese sería el único camino que le permitiría salirle al paso a la restricción impuesta por la Corte.

La aspiración de Francisco Santos parece más un chiste, resulta ser casi una aspiración folclórica, no sólo porque “ Pachito” carece de la fuerza e ideas de un estadista que hasta el momento lo han llevado a tratar de dar golpes de opinión con unas vallas publicitarias que no han sido bien recibidas, sino porque en el mejor de los escenarios para él, de tomar fuerza su candidatura, quedaríamos en el país ahí sí con la peor de las elecciones de que tenga noticia Colombia en toda su historia, y es la de dos primos que al parecer no se guardan muchos afectos, disputándose la presidencia de un país. De darse esa posibilidad electoral, ahí sí las elecciones serían aún más aburridas, casi que vergonzosas, en la que muchos colombianos estarían atentos solo a que el tiempo pasara rápido para evitar ese espectáculo. Le daría otro aire a la contienda electoral el que la izquierda logre postular a un candidato que tenga alguna aceptación, como sería el caso de Clara López, mujer seria que en los pocos meses que alcanzó a estar en la alcaldía de Bogotá, mostró visión y proyección política, porque hablando de la izquierda, nada peor para su imagen que lo que ha hecho Petro en Bogotá, o mejor, lo que no ha hecho. Ojalá al menos se dé esta opción, porque de lo contrario, con un poder presidencial tan fuerte en Colombia, así como vamos, las elecciones prometen ser muy aburridas.
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