La llegada del gobierno Duque como todo nuevo gabinete genera expectativas. Las mías desde el principio han sido muy pocas. Y no precisamente por estar en lejanías ideológicas sino por el grado de inmadurez, improvisación y grado de dependencia que ha tenido el presidente con la política de Uribe.

Si bien Colombia es un país con infinidad de problemas la mayoría de los cuales requieren mucho análisis, debate y precisión; lo que ha dejado entrever este gobierno con su entrada –¡si es que ya inició! evidencia el desagradable plato fuerte que recibiremos.

En efecto, es de los pocos gobiernos salvo algunas excepciones –como el caso de Trump- donde en tan corto tiempo los desaciertos y rechazos son tan amplios. No hay claridad en la agenda política del presidente: primero posa de “anti-gobierno” tradicional para luego hacer las maromas de casi siempre de colocar personas sin escrúpulosmorales en cargos importantes como son el Ministerio de Hacienda en cabeza de Alberto Carrasquilla y el de embajador en la OEA en cabeza de Alejandro Ordoñez, por mencionar algunos ejemplos.

Esta política encarna lo mismo de las anteriores solo que enfatizando más en los grandes errores. ¿Es posible entender la crueldad y desdicha que produce escuchar al Ministro Carrasquilla hablando de una reforma tributaria que pretende subir más los impuestos de la clase trabajadora media y baja? Por Dios estos señores hicieron oposición al gobierno Santos con la premisa del “rechazo” a esa nefasta reforma tributaria de dicho gobierno donde entre otras cosas subió el IVA de 16% al 19%.

Ahora sin pudor y sin tener en cuenta la realidad económica que viven muchas regiones de Colombia nos van a introducir –entiéndase en cualquier sentido el término- semejante orangután de reforma tributaria. Yo espero que el Congreso este a la altura política y no la apruebe. Los pobres y aquellos con ingresos medios no tienen porqué pagar la improvisación de este gobierno que hizo campaña en poesía y olvidó que se gobierna en prosa. El presidente Duque fue uno de los grandes opositores a subir impuestos cuando era senador.

Por otra parte, su agenda legislativa es invisible y ha sido visibilizada por las iniciativas que han presentado otros partidos diferentes a los de la coalición de gobierno que van a permitir el debate sobre temas fundamentales: reforma política, reforma a la justicia, implementación del acuerdo de paz, mesa de diálogo con el ELN, estrategias frente a las drogas y su crecimiento, erradicación de cultivos y sustitución, etc. En este punto debo destacar dos cosas: el doctor Vargas Lleras es el único de los excandidatos a la presidencia que ha presentado una agenda política y legislativa importante. Lo segundo es que la concertación frente a los temas de la consulta anticorrupción es gracias a los otros partidos que no están en la coalición de gobierno del presidenteDuque.

Por último, sobre las grandes reformas que necesita nuestra región:¿cómo es eso de la zona franca, acaso ya no existe en Cúcuta? ¿el decreto lesivo de internación cuando lo van a modificar o derogar?¿qué régimen tributario especial van a implementar en nuestra región para incentivar el empleo y la creación de empresas? ¿qué grandes inversiones públicas vendrán para la región? ¿qué políticas públicas se implementarán para atender la situación migratoria en temas como salud, educación, empleo? ¿habrá voluntad política para todo lo anterior? Muchos dirán que el gobierno lleva muy poco de haber iniciado,pero como dice el adagio popular “desde el desayuno se sabe lo que va a ser la comida”.