22 mineros que habían sido secuestrados por disidencias de las Farc en zona rural de Santiago (Norte de Santander) fueron liberados tras la presión militar ejercida por tropas del Grupo de Acción Unificada para la Libertad Personal - Gaula - con el apoyo de la Fiscalía General de la Nación.
Los trabajadores, por los que el grupo armado exigía el pago de 40 millones de pesos, fueron hallados por los militares de la Brigada 30 en la vereda La Amarilla, sector donde el jueves pasado se había registrado el plagio masivo.
En el desarrollo de la operación, las tropas del Ejército Nacional sostuvieron un combate contra los delincuentes que tenían intimidados a los productores y comercializadores de carbón de la región.
Tras el intercambio de disparos, fueron capturados en flagrancia cuatro integrantes de esta estructura, entre los que se encuentra ‘Rafa’, presunto líder de esta comisión armada, y quien llevaría siete años delinquiendo y con injerencia en los municipios de Santiago, Sardinata y el Zulia, donde, al parecer, venían realizando cobros extorsivos a finqueros, propietarios de minas y comerciantes.
En el hecho fueron recuperadas cuatro armas con proveedores, 90 cartuchos, material de intendencia y equipos de telefonía móvil.
Los capturados fueron judicializados por los delitos de secuestro extorsivo, concierto para delinquir, fabricación, tráfico y porte de armas municiones de uso privativo de las Fuerzas Armadas.
En otros hechos, los militares, con apoyo de la Fuerza Aérea y la Policía Nacional, hallaron en parajes de Ocaña y Tibú dos rústicos laboratorios para el procesamiento de narcóticos.
En la vereda Pueblo Nuevo, en Ocaña, ubicaron un laboratorio para el procesamiento de clorhidrato de cocaína, presuntamente perteneciente a Los Pelusos. Al interior del complejo ilícito ubicaron 104 kilogramos de clorhidrato de cocaína, 480 galones de acetona, 75 kilogramos de soda cáustica, un gusano de dos cavidades, una planta eléctrica, un ‘marciano’, una prensa hidráulica, una caldera, un panel eléctrico y una tolda de decantación.
Simultáneamente, en la vereda Nazareth de Tibú, tropas de la misma unidad militar encontraron una estructura para el procesamiento de pasta base de coca, al parecer del Eln.
En el lugar estaban 90 kilogramos de cemento, 75 kilogramos de cal, 6 kilos de permanganato de Potasio, 15 kilos de sulfato de amoniaco, 13 canecas metálicas, tres canecas de 55 galones de crudo refinado y un galón de ácido sulfúrico.
Tanto los precursores químicos como el material utilizado para el procesamiento del alcaloide fueron destruidos de manera controlada.