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Analistas del Táchira consideran que Estados Unidos busca asegurar el petróleo venezolano
Las reuniones de Venezuela con EE.UU  le dan cierta legitimidad al gobierno de Nicolás Maduro
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Jueves, 10 de Marzo de 2022

La reunión del presidente Nicolás Maduro con enviados del gobierno de Estados Unidos  durante el pasado fin de semana en Caracas, significa un mensaje para Rusia, según el análisis de Pavel Rondón, exembajador de Venezuela en Colombia, analista político del Táchira y  presidente de la Fundación Escuela, Gobierno Mundo y Fronteras (Fundef).

Rondón expuso que el subsecretario adjunto para el hemisferio occidental y el embajador encargado para Venezuela, James Story, vienen a hacer un acto de presencia en un territorio que se considera zona de influencia de Rusia.

“Quiere decir: A ti te preocupa Ucrania, a nosotros nos preocupa Venezuela”, señaló el especialista, motivo por el cual, durante la reunión Venezuela dio a Estados Unidos garantía de cambio y de inmediato Nicolás Maduro expresó cambios radicales con la oposición, con la que replantea una nueva jornada de diálogos.

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Mientras que Maduro pidió garantías de producir, exportar y vender el petróleo, lo cual se espera que sea el tema en la próxima reunión.

Estos cambios son parte del ambiente guerra fría, indicó Rondón, además la redefinición nuclear, que quiere decir que Ucrania pese a pertenecer a la Unión Europea no ha recibido la participación directa en el país, pese a resultar agredida, debido a que Rusia en minutos está en la capacidad de colocar cargas nucleares en países de Europa, y dejarlos indefensos.  

Estados Unidos hasta ahora mantiene una posición frontal frente al gobierno de Venezuela por razones políticas, tanto en la presidencia de Hugo Chávez como la de Nicolás Maduro, para evitar que otros países se opongan a ellos, se retiren a la OEA (Organización de Estados Americanos), creen organismos como la Celac, Petrocaribe, Unasur, que se oponen a la políticas públicas energéticas de Estados Unidos en América Latina, detalló el analista.

Luego de que Maduro asumió un segundo mandato en elecciones ampliamente cuestionadas, Estados Unidos y Venezuela rompieron relaciones diplomáticas a principios de 2019. Washington reconoció entonces al líder opositor Juan Guaidó, presidente del Legislativo, como única autoridad legítima, e impuso una batería de sanciones a Caracas en pos de forzar la salida de Maduro.

Las medidas incluyen un embargo vigente desde abril de 2019 que impide a Venezuela negociar su crudo -que representa el 96% de los ingresos del país- en el mercado estadounidense.

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Pavel Rondó refirió que, por  lo declarado por el presidente Maduro, vuelven las llamadas negociaciones de México, lo que es muy positivo para Venezuela, en vista de que serán liberados presos políticos, además se lograría  replantear el negocio petrolero aprovechando los precios por encima de los 100 dólares, lo que incrementaría los ingresos de divisas, podría  mejorar la economía nacional y darle beneficios políticos.

“Lo que ha ocurrido entre Estados Unidos y Venezuela tiene que ocurrir entre las relaciones entre Colombia y Venezuela, inclusive, con el estado de tirantez que existe entre los dos países deberían transformarse las relaciones económicas fronterizas, políticas y humanas, que la gente pueda ir a su trabajo y los niños a su escuela”, expresó el analista tachirense.

Maduro gana legitimidad

Luis Díaz, politólogo y especialista en frontera tachirense, precisó que el gobierno de Joe Biden, bajo la premisa de no generar un altercado mayor en el concierto internacional, donde ya el petróleo viene subiendo de precio desde hace semanas, busca asegurar el hidrocarburo con proveedores naturales, tomando en cuenta que Venezuela tuvo la capacidad de producir gran parte del petróleo para abastecer a los Estados Unidos.

 

Luis Díaz asegura que Estados Unidos y Venezuela nunca han roto relaciones en materia energética. / Foto: Cortesía / La Opinión

 

En su análisis, Díaz destacó que durante el gobierno de Chávez, Venezuela nunca dejó de ser un  proveedor seguro en materia petrolera para el gobierno estadounidense.

Por ello, dilucida que  el conflicto de Ucrania ha acelerado el proceso de negociaciones entre Venezuela y Estados Unidos, con una metodología promovida por los países de la OTAN, de promover un aislamiento en materia energética a Rusia, motivado a que en la mesa existe la opción de un embargo petrolero a Rusia. Si eso llega a ocurrir, algunos expertos en materia energética han previsto que el precio del petróleo pudiera llegar hasta 300 dólares, agregó el politólogo.

“Si ese escenario se da, no cabe la menor duda que viviríamos una recesión mundial, muchísimo más grande, con consecuencias similares a las generadas por el coronavirus”, advirtió. 

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En este caso, el politólogo explicó que el gobierno de Venezuela gana la legitimidad y se le reconoce en cierto modo al presidente Nicolás Maduro como la persona que tiene el control sobre el territorio y ejercicio de la soberanía. El segundo elemento político es que gana un período de institucionalización de la vía política del país.

Sanciones de por medio

El exgobernador del Táchira, Cesar Pérez Vivas considera que la reunión de los funcionarios norteamericanos con Maduro es el resultado de un proceso de conversaciones que se vienen realizando con actores de la comunidad internacional para conseguir el levantamiento de sanciones.

 

Cesar Pérez Vivas señala que Venezuela responde a la presión de la comunidad internacional y de las sanciones. / Foto: Cortesía / La Opinión

 

Refirió que la invasión a Ucrania ha producido cambios geopolíticos que ha producido cambios que han acelerado ese proceso, y en la situación que se encuentra Maduro le ha obligado a ofrecer concesiones que le permitan cualquier tipo de beneficio en cuanto a las sanciones, de ahí el anuncio de Nicolás Maduro de volver a la mesa de negociación en México, pero esto no significa que estén dadas las condiciones para retomar la normalidad institucional en Venezuela.

“Falta por ver si la mesa de negociación de México va a tener algún tipo de resultado, puesto que hasta la presente ha sido un ejercicio inútil de conversaciones, con el que el gobierno ha ganado tiempo y ha permitido participar en elecciones ventajosas”, señaló Pérez Vivas.

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