La colombiana Catalina Cruz del grupo de candidatas latinas, conocidas como las "insurgentes" porque retaron con éxito al "establishment" del Partido Demócrata en Nueva York, acudieron este martes a las legislativas de EE.UU. sabedoras de que juegan en campo propio y dominarán el estado.
La antioqueña de 35 años llegó a Estados Unidos cuando tenía 9 años y vivió como indocumentada cerca de una década. Ahora, es un abogada laboralista defensora de los derechos civiles y representará a los migrantes en la asamblea de Nueva York.
El grupo de mujeres está liderado por Alexandria Ocasio-Cortez, que se dirigirá a Washington para convertirse en la congresista más joven en la historia del país estadounidense.
Este poder femenino y latino hace campaña puerta a puerta y ha logrado que los votantes, que se vieron reflejados en sus historias de superación, abrazaran sus propuestas y les dieran la victoria en las pasadas primarias del Partido Demócrata de junio.
El grupo de las "insurgentes" latinas lo completan las abogadas y activistas Jessica Ramos y Julia Salazar, ambas de padres colombianos, novatas en la política que se presentan a senadoras estatales -Cruz a la Asamblea- en un año en el que un gran número de mujeres demócratas ha dado un paso al frente para aspirar a diversos cargos.
Estas mujeres comparten además su triunfo con Alexandria Biaggi y Karines Reyes, de El Bronx, en lo que se prevé aumentará la presencia femenina y latina en la legislatura estatal de Nueva York.
Son mujeres que se han postulado bajo un Gobierno que en dos años de administración del presidente Donald Trump ha sido criticado por atentar contra sus derechos reproductivos, de racismo, de separar familias, de estar en contra de la inclusión y de la igualdad, un mandatario al que acusan incluso de misógino por sus expresiones soeces respecto a las mujeres.
Ocasio-Cortez, educadora comunitaria nacida en El Bronx, que pasó de desconocida activista a ocupar titulares a nivel nacional desde la revista "Vogue" al "The New YorkTimes", protagonizó la victoria más contundente y sorprendente, incluso para ella, al derrotar al poderoso y veterano congresista Joe Crowley en las primarias demócratas.
A Crowley se le consideraba el próximo presidente de la Cámara de Representantes en el caso de un triunfo de los demócratas en los comicios del 6 de noviembre.
"La comunidad está lista para un movimiento de justicia social y económica", afirma la ahora candidata al Congreso, de tan solo 28 años.
Ocasio-Cortez, que trabajó para la campaña del senador Bernie Sanders, entonces aspirante a la candidatura presidencial, es parte de la organización nacional "Democratic Socialists of America (DSA)", que se ha convertido en una fuerza significativa en el Partido Demócrata y ha impulsado con fuerza a candidatos progresistas en el país.
Este grupo de mujeres progresistas incluye también al concejal afroamericano de Massachussetts Ayanna Pressley, de 44 años, que derrotó en las primarias de forma inesperada al veterano congresista Michael Capuano.
Pressley defendió durante su candidatura la urgente necesidad de que en la época del presidente Trump "el cambio no puede esperar".
Para Ocasio-Cortez, el socialismo es garantizar una vida digna, que todos los niños tengan una buena educación, que la pobreza no impida tener los servicios de salud que se necesitan o que los derechos civiles no sean violados.
