El Eln sigue dejando su huella criminal en Cúcuta. Las primeras pesquisas que han recopilado las autoridades tras el reciente atentado ocurrido la tarde del jueves, en la avenida Demetrio Mendoza, contra unidades de la Policía de Tránsito, dejó al descubierto las similitudes de los explosivos utilizados por este grupo armado ilegal en los recientes hechos contra la Fuerza Pública.
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El general Jorge Luis Vargas, director de la Policía Nacional, ofreció una recompensa de hasta 100 millones de pesos, por la información que conlleve a la captura de los responsables del reciente atentado, que dejó sin vida a Elizabeth Niebles Martínez, de 53 años, quien pasaba por el lugar del hecho al momento de la explosión, así como a cuatro patrulleros de la Seccional de Tránsito y Transporte y a otra mujer heridos.
El oficial resaltó que el atentado de la tarde del jueves, “reúne características similares al ocurrido en Cúcuta hace unos días (el 30 de agosto en Atalaya), el cual el Eln se adjudicó. De acuerdo con lo que nos dicen los técnicos en explosivos, este tiene condiciones de armado muy similares a lo que permanentemente el Eln arma en sus artefactos para atentar contra la Fuerza Pública y las personas en Colombia”.
Por lo tanto, la seguidilla de atentados que se inició con el ocurrido contra la Policía en Chinácota, la noche del 5 de julio, posteriormente el 30 de agosto, en el comando del segundo distrito de la Policía, en Atalaya, y el más reciente, el jueves, se convirtió en un ataque sistemático contra la institución, que busca generar terror y miedo.
El general Óscar Moreno, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que la institución no va a descansar hasta capturar a los responsables de estos hechos.
El oficial insistió en que los constantes golpes que han asestado las autoridades contra el Eln, en los últimos nueve meses, han debilitado las finanzas de este grupo armado ilegal que se financia principalmente del narcotráfico.
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En consecuencia, los ataques contra la Policía son la evidencia del “malestar” que le produce al Eln las incautaciones de drogas, la destrucción de laboratorios para producir la cocaína, la incautación de armas y las capturas de sus integrantes, es la justificación que las autoridades dan por los hechos violentos que se están dando.
En la zona rural de Cúcuta y la frontera con Venezuela, donde el Eln también tiene injerencia, se robustece el accionar criminal de la guerrilla, por lo que desde allí, en conjunto con el fortín que mantiene en el Catatumbo, se planean y se ejecutan los atentados.
Las autoridades están analizando algunos videos que servirán para identificar a los responsables del atentado contra las unidades de la Seccional de Tránsito y Transporte que la tarde del jueves adelantaban un puesto de control, como lo hacen a diario.
La víctima
Según se conoció, Elizabeth Niebles Martínez, oriunda del Cesar, como fue identificada la víctima mortal del atentado del jueves, trabajaba como empleada doméstica y justo en el momento de la explosión, iba caminando hacia su casa, ubicada en el barrio San Martín.
La mujer quedó tendida a un costado de la vía, junto con las motocicletas de la Policía que estaban parqueadas en este lugar.
“Era una señora humilde, de bajos recursos, por lo que lamentamos este hecho”, dijo el general Moreno.
La patrullera Jésica Carolina Franco, de la Seccional de Tránsito y Transporte, una de las que resultó herida en el atentado, aseguró que se encuentra bien de salud y sigue motivada para seguir cumpliendo con sus labores.
“Mi compañera y yo salimos lesionadas, gracias a Dios nos encontramos bien y con la motivación y las ganas de salir adelante, de seguir trabajando por la comunidad”, dijo la patrullera.
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