“El cuadrante de la Policía estaba a una cuadra del billar y apenas escucharon los tiros, se fueron por la avenida Las Américas, en contravía, para llegar más rápido al establecimiento. Allí vieron que los tipos corrieron por una callejuela y se montaron a un taxi, por lo que de inmediato alertaron a las unidades del Centro Automático de Despacho (CAD) para seguirlos por las cámaras de vigilancia”, explicó una fuente judicial en ese momento.
Diego Andrés, de 22 años, oriundo de Ocaña, llevaba tan solo dos meses de haber salido de prisión cuando volvió a ser capturado. En esa ocasión le imputaron porte ilegal de armas y hurto agravado y calificado.
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“Él (Diego Andrés) por esos tres delitos pagó una condena de 60 meses en la cárcel de Cúcuta. Es importante recalcar que tiene 22 años, ya ha pagado 5 años de prisión y dos meses, después de salir vuelve a delinquir”, manifestó una fuente judicial.
El otro capturado, Enrique Navarro, de 29, no contaba con antecedentes. Los hombres fueron hallados con dos armas de fuego, 9 milímetros, doce cartuchos y tres proveedores, por lo que fueron trasladados a la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía.
Su responsabilidad
Una fuente policial aseguró que Jacinto Contreras participó en el hecho, además de transportar a los dos pistoleros. “Él no solo los transportó, sino que fue partícipe al igual que los otros dos detenidos. La investigación permitió establecer que esta persona tenía conocimiento de lo que estaban cometiendo sus cómplices”, dijo la fuente.
El taxista fue presentado en audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y medida de aseguramiento, en las que un juez decidió enviarlo a la cárcel.
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