La Juventus y el Inter de Milán igualaron 1-1 este martes en la ida de semifinales de la Copa de Italia, en un partido que concluyó con enfrentamientos tras el empate de los Nerazurri con un penal y la expulsión de Romelu Lukaku por provocación al celebrar el gol.
El colombiano Juan Guillermo Cuadrado (90+7), y el arquero esloveno del Inter Samir Handanovic también fueron expulsados por un enfrentamiento tras el pitido final en el que tuvieron que ser separados, formándose un tumulto de jugadores y técnicos de ambos equipos.
En Turín, los Bianconeri pensaron que habían dado el golpe cuando el propio Cuadrado, tras un centro de Adrien Rabiot a siete minutos de final, marcaba entrando por el segundo palo y con un disparo raso y cruzado.
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Pero el Inter consiguió empatar gracias a una mano del defensa brasileño Gleison Bremer. Marcó Lukaku (90+5), que a continuación recibió la segunda amarilla porque el árbitro estimó que había provocado a los hinchas turineses en la celebración de su gol.
El delantero belga había visto el primer cartón por un exceso de ímpetu en el minuto 80.
"Lukaku celebra siempre así los goles, luego desafortunadamente ha habido una pelea, esto nos privará de dos jugadores fundamentales en la vuelta. Dominamos sin acertar a marcar, pero no puedo reprochar nada a mis jugadores, fue un buen partido en un momento difícil para nosotros", analizó el técnico del Inter Simone Inzaghi.
'A 20 segundos del final...'
Hasta el acelerón final, con goles y polémicas, el partido había sido vibrante, con ocasiones para ambos equipos en una reedición de la final de 2022 que ganó el Inter (4-2 tras prórroga).
Las mejores opciones locales fueron para el argentino Ángel Di María (4) y el serbio Dusan Vlahovic, con dos remates de cabeza (38 y 47).
Por el Inter el croata Marcelo Brozovic (33) y el armenio Henrikh Mkitaryan (64) también rondaron el gol.
"El resultado me parece justo, ellos tuvieron ocasiones y nosotros también. Es una pena porque a 20 segundos del final era una situación evitable", señaló el técnico bianconero Massimiliano Allegri, haciendo referencia al penal concedido por su equipo
El pase a la final se disputará en la vuelta, el 26 de abril en San Siro, entre los dos favoritos al título.
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En la otra semifinal chocan este miércoles la Cremonese, colista de la Serie A, y la Fiorentina.
La Fiorentina, con ocho victorias consecutivas contando todas las competiciones, busca llevar a su vitrinas una séptima Copa de Italia, más de dos décadas después de conquistar la última (2001).
La Cremonese, encaminada al descenso en la Serie A, es el matagigantes de la actual Copa, tras haber eliminado al Nápoles (2-2 tras prórroga, 5-4 en penales) y a la Roma (2-1).
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