Viernes, 21 de Junio de 2013
El próximo 30 de junio se cumple el centenario del nacimiento de Alfonso López Michelsen, fallecido hace seis años y quien ocupara la Presidencia de la República de 1974 a 1978.
Una vida intensa y extensa que marcó una huella importante no solamente en el acontecer nacional, sino en el partido Liberal, el que dirigió y orientó en varias ocasiones.
Abogado, constitucionalista y escritor de permanente pluma, dejó innumerables escritos no sólo relacionados con el tema político, sino también en el plano histórico y literario, en donde aprendió desde temprana edad a afinar un estilo ameno y de muy buena factura que lo convirtieron en escritor de obligada lectura, así en muchas ocasiones no se estuviera de acuerdo con su criterio: siempre punzante y polémico que llegaba hasta orillas insospechadas, levantando ampollas, sembrando ideas no convencionales, o simplemente llevando la contraria.
La Universidad Libre y la Academia Colombiana de Historia, acaban de publicar un grueso volumen de 642 páginas, escrito por el jurista e historiador Benjamín Ardila Duarte y denominado “El profesor Alfonso López Michelsen: constitucionalista y hombre de Estado” que recoge muchos de los episodios que enmarcaron la vida y obra del personaje, comenzando por una síntesis biográfica y adentrándose en los hechos mas significativos de su personalidad y de sus ejecutorias.
Tiene la particularidad este libro, que es escrito por una de las personas que más lo conoció íntimamente, pues fue su amigo de muchos años y compartió con él de manera permanente su faceta de jurista y de historiador.
Estas circunstancias le permiten a Ardila Duarte pasearse por esa extensa obra de López, deteniéndose de manera particular en aspectos como el de tratadista del Derecho; la ideología que manejó el político; su obra de gobierno; su papel frente al Derecho Internacional, al que le dedicó muchos de sus profundos análisis, y otros aspectos de su faceta personal y política.
Fue sin duda una larga vida: 94 años, en los que no tuvo pausa ni retiro, pues siempre permaneció conectado con la actualidad nacional; a pesar de que solía decir que los Ex presidentes eran como muebles viejos que todo el mundo apreciaba, pero no sabían dónde colocar, él siempre reclamaba un sitio y defendía una posición y así se llegó a considerar como un personaje que ´daba guerra´ y generaba opinión.
Estas páginas, bien escritas y ordenadas, constituyen una oportunidad para repasar esa larga vida, que en la segunda mitad del siglo XX y principios del XXI, tanto influyó en los asuntos de la vida colombiana.
(Colprensa).
Una vida intensa y extensa que marcó una huella importante no solamente en el acontecer nacional, sino en el partido Liberal, el que dirigió y orientó en varias ocasiones.
Abogado, constitucionalista y escritor de permanente pluma, dejó innumerables escritos no sólo relacionados con el tema político, sino también en el plano histórico y literario, en donde aprendió desde temprana edad a afinar un estilo ameno y de muy buena factura que lo convirtieron en escritor de obligada lectura, así en muchas ocasiones no se estuviera de acuerdo con su criterio: siempre punzante y polémico que llegaba hasta orillas insospechadas, levantando ampollas, sembrando ideas no convencionales, o simplemente llevando la contraria.
La Universidad Libre y la Academia Colombiana de Historia, acaban de publicar un grueso volumen de 642 páginas, escrito por el jurista e historiador Benjamín Ardila Duarte y denominado “El profesor Alfonso López Michelsen: constitucionalista y hombre de Estado” que recoge muchos de los episodios que enmarcaron la vida y obra del personaje, comenzando por una síntesis biográfica y adentrándose en los hechos mas significativos de su personalidad y de sus ejecutorias.
Tiene la particularidad este libro, que es escrito por una de las personas que más lo conoció íntimamente, pues fue su amigo de muchos años y compartió con él de manera permanente su faceta de jurista y de historiador.
Estas circunstancias le permiten a Ardila Duarte pasearse por esa extensa obra de López, deteniéndose de manera particular en aspectos como el de tratadista del Derecho; la ideología que manejó el político; su obra de gobierno; su papel frente al Derecho Internacional, al que le dedicó muchos de sus profundos análisis, y otros aspectos de su faceta personal y política.
Fue sin duda una larga vida: 94 años, en los que no tuvo pausa ni retiro, pues siempre permaneció conectado con la actualidad nacional; a pesar de que solía decir que los Ex presidentes eran como muebles viejos que todo el mundo apreciaba, pero no sabían dónde colocar, él siempre reclamaba un sitio y defendía una posición y así se llegó a considerar como un personaje que ´daba guerra´ y generaba opinión.
Estas páginas, bien escritas y ordenadas, constituyen una oportunidad para repasar esa larga vida, que en la segunda mitad del siglo XX y principios del XXI, tanto influyó en los asuntos de la vida colombiana.
(Colprensa).