Imponente y majestuoso como siempre, pese a ser apenas un vestigio de lo que un día fue; fresco para que ninguno de sus visitantes se fuera a sentir incómodo; colorido y lleno de mucho fulgor. Así recibió ayer el Templo Histórico, el lugar donde todo comenzó, a los cientos de invitados que llegaron desde diferentes lugares del país y del mundo para conmemorar los 200 años de la gesta que abrió el camino de una República democrática y libre.

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El Bicentenario de la Constitución de 1821, promulgada un día como ayer por Simón Bolívar en la Villa del Rosario de Cúcuta, fue el motivo que congregó en el mismo punto que en aquel entonces a los representantes de las naciones que le dieron vida a la Gran Colombia: Ecuador, Panamá, Venezuela y Colombia.

Y fueron los delegados de esos países, encabezados por los embajadores de Ecuador en Colombia, Rafael Paredes Proaño, y de Panamá, Liliana Fernández Puentes; además del comisionado presidencial para las Relaciones Exteriores de Venezuela, del gobierno interino, Julio Borges, los encargados de acompañar al presidente de Colombia, Iván Duque, en la apertura de los actos conmemorativos de esta histórica fecha.

Una ofrenda floral en el coloso de Francisco de Paula Santander, el hombre de las leyes e hijo ilustre de estas tierras nortesantanderenas, marcó el inicio de la emotiva celebración que se extendió por dos horas, tiempo en el cual la historia se mezcló con las expresiones artísticas y culturales, permitiendo rememorar lo que significó para la nación su primera carta política, suscrita en este punto de la frontera colombo-venezolana. Un documento que, como lo recordó el presidente de la Corte Constitucional, Antonio José Lizarazo, sentó las bases de nuestra organización política y adoptó las instituciones que aún hoy constituyen elementos esenciales del estado de derecho.

El presidente Iván Duque y las delegaciones de Ecuador, Panamá y Venezuela hicieron presencia en el Templo Histórico de Villa del Rosario. Foto: Juan Pablo Cohen - La Opinión

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El mensaje de los niños

Algunos de los momentos más importantes de la conmemoración fueron protagonizados por los niños, quienes dejaron sobre la mesa también sus reflexiones en torno a la importancia de materializar aquellas conquistas que fueron posibles con la Constitución de 1821, como la libertad y el derecho a la educación, pero que aún siguen siendo esquivas.

Yurley Adriana Flórez y Angie Isabella Castañeda, estudiantes del colegio Luis Gabriel Castro, de Villa del Rosario, recordaron que tal y como quedó consignado en la carta magna hace 200 años, solo la educación podría conseguir y difundir la libertad conquistada.

“Somos nosotros quienes les garantizaremos la verdadera libertad que es la que se adquiere con el conocimiento”, dijeron.

Así mismo, invitaron a mantener viva y en pie la lucha por una libertad sin discriminación y un ejercicio pleno de libertad.

Conozca: 

Los niños de las escuelas de formación pública de la Casa de la Cultura de Villa del Rosario. Foto: Juan Pablo Cohen. / La Opinión

La cultura dijo presente

Las muestras artísticas y culturales que engalanaron la noche e hicieron vibrar a los asistentes también estuvieron cargadas de historia y recuerdos.

La Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia y sus magistrales interpretaciones como el ‘Aleluya de la Misa’, el Himno de la Alegría, entre otros, fue la encargada de acompañar al reconocido cantautor Orlando ‘Cholo’ Valderrama, a narrar a través de la música la historia de cómo se llegó a la Constitución de la Villa del Rosario de Cúcuta.

Los 167 niños y niñas de las escuelas de formación pública de la Casa de la Cultura de Villa del Rosario acapararon la atención de los invitados con una puesta en escena en la que recrearon el valor de  la niñez, la juventud y la esperanza.

Por su parte, la cantante Maia, célebre por sus potentes interpretaciones, puso el toque de sabor, al entonar la popular canción del Joe Arroyo, ‘La Rebelión’, que rememora justamente los años de esclavitud.

Entérese: 

La artista estuvo acompaña por el  grupo ‘Delirio Ballet Universal’s’, un espectáculo de bailarines de talla mundial que puso a mover en sus sillas a los asistentes, incluido el propio presidente Duque y otros de los invitados especiales.

El show de mapping y hologramas sobre la fachada del Templo Histórico del parque Grancolombiano denominado ‘Sueño de una gran nación’ dejó sin aliento a quienes se encontraban en el Templo Histórico y se convirtió en uno de los principales atractivos de la noche.

La Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia deleitó a los asistentes. Foto: Juan Pablo Cohen - La Opinión

Un discurso de unidad

Como aquel 6 de octubre de 1821, cuando se promulgó la Constitución y se invocó la unidad de los pueblos, el presidente Iván Duque y sus homólogos de Ecuador, Panamá y Venezuela (interino), quienes no estuvieron presentes, pero se unieron por medio de mensajes en video, coincidieron en que este Bicentenario es un motivo para trabajar por la integración.

“Quiero invitarlos a todos ustedes a que hoy celebremos la unidad, a que reconozcamos que fue aquí donde empezó el sueño de la República, a que fue aquí donde nuestros padres fundadores, donde nuestros héroes, dejaron a un lado las diferencias y pensaron en el concepto de esa Gran Colombia”, manifestó Duque.

El mandatario de Ecuador, Guillermo Lasso, dijo que al celebrar esta importante fecha es oportuno reiterar el ejemplo de aquellos hombres que suscribieron la Constitución de Cúcuta.

“Coherente con ello, el gobierno que me honro en presidir, se ha propuesto revertir en profundidad la nefasta herencia que tanto en materia de libertades y derechos, como en términos económicos y sociales, nos ha dejado el régimen autoritario y demagogo que en años recientes procuró eliminar la tradición democrática y libertaria del pueblo ecuatoriano”, sostuvo.

El jefe de Estado colombiano aprovechó la trascendencia que tiene para esta zona de frontera este Bicentenario e insistió en que a pesar de las dificultades, Colombia no ha dejado de tenderles la mano a los migrantes venezolanos.

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“Cuando hablamos de la integración entendemos que somos pueblos hermanos que nos ayudamos. Que en los momentos más difíciles de nuestra historia fueron también nuestros hermanos venezolanos, ecuatorianos y panameños quienes nos abrieron sus puertas. Quienes les permitieron a millones de colombianos construir también un propósito vital”, manifestó.

Al término de los actos de celebración, los anuncios también se hicieron presentes y en esa medida el presidente Duque exhibió el primer carné de muestra que identificará a los venezolanos beneficiados con el Estatuto Temporal de Protección.

Desde las ruinas del lugar que fue la cuna de la Constitución y donde se abrió la puerta para liberar a la nación del yugo de los españoles, el mandatario también informó que ya firmó el decreto a través del cual se reglamentan las 16 curules de paz para las víctimas.

Y así, con la misma imponencia que los recibió, el Templo Histórico despidió a sus ilustres visitantes, con la esperanza de que la conmemoración de estos 200 años de historia no se quede reducida a la efusividad de un día y que lo que allí yace como recuerdo de aquel trascendental momento se preserve cientos de años más y no quede sepultado por el olvido.

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