Se me ocurrió la semana pasada, expresar por la red, una vieja idea recogida en el simposio de rectores universitarios de 1998, sobre Ciencia, Innovación y Desarrollo Regional, que hoy confronto como una realidad nacional. Una de esas ideas que, al formularse y oírla, uno decía; ¡ah! es otra más entre tantas, de las quedan entre los apuntes que toman.
Hoy, es una idea ácida, como la expresé y que lo menos que generó fue uno que otro insulto diplomáticamente endulzado. Es un concepto geográfico con adobo politiquero. Fue hipótesis que en 23 años es una realidad en la cual se demuestra que nosotros los nortesantandereanos nos dormimos. Como en el sueño estúpido de los setenta, cuando sugerimos Cínera y dos plantas de tratamiento de residuos sólidos, que en cincuenta años son el “Arco de la mediocridad” no construido, que, si existiera, deberíamos derruir como hacen con el monumento profanado por los vándalos en Bogotá.
Y es que, en el 98, la hipótesis sugería que en estas décadas siguientes, ya llevamos dos, el desarrollo colombiano se concentraría en tres ejes geográficos: el de la costa atlántica, el del marginal de la selva y el eje Medellín – Cali. El primer eje que por inercia se volvió realidad con inversiones nacionales e internacionales que ya venían empujando hacia sus cuatro puertos caribe que incluye el Urabá.
El segundo eje, que los cucuteños no quisimos ver y observar, distraídos en la venta de baratijas, que es el resultado de los grupos de presión de Venezuela por salir al mar Pacífico y al sudeste asiático, que incluye carretera Bogotá Villavicencio y hacia el Pacífico, el túnel de la Línea y la conexión Tuluá – Chaparral- y el tercer eje: Medellín -Cali que tiene como centro al Eje Cafetero y es fachada hacia la cuenca del Pacífico.
En ese simposio del 98 se nos preguntó a los santandereanos de tan tradicional hospitalidad y pujanza ¿ustedes dónde están? Bueno y ahí nos incluyeron a los nortesantandereanos.
Solo que ellos desde entonces lo tomaron en serio. En las dos décadas del nuevo milenio proyectaron y realizaron la base de un futuro desarrollo que se les había enfriado desde los años cincuenta, cuando lo “craneó” Galán Gómez.
En ese entretanto, ellos han construido dos represas, la de Tona, exclusivamente para remediar definitivamente la sed y otra Hidro Sogamoso, de multipropósito que genera 5.056 MWh al año o el 10% de la energía eléctrica que consume Colombia. La doble calzada Bucaramanga -Barranca o ruta del Cacao está por terminarse (80%), cinco modernos y bellos viaductos en Bucaramanga: Antonia Santos, Guatiguará, Peatonal de Floridablanca, Viaducto Alejandro Galvis R.
Nosotros nos quedamos en nada. Si no se hubieran dado los atentados de La Donjuana de 2007 y 2011, pues no se habría dado el documento Conpes 3798 que se afrontó por Ecopetrol como una contingencia, ni estaríamos en el evento de la terminación del AMC. ¿No estamos en ninguno de los tres ejes de desarrollo?
Vale decir desde 1998 no tenemos Plan, en consecuencia, no tenemos Visión del Departamento y de Cúcuta. Conforme a las advertencias del Simposio, ellos atendieron el llamado e introdujeron su documento de prospectiva y van bien.