Jueves, 2 de Octubre de 2014
~Por primera vez las autoridades ocuparon con fines de extinción de
dominio 66 locales comerciales en pleno centro de Bogotá, dedicados a la
compra y venta de celulares robados.~
Por primera vez las autoridades ocuparon con fines de extinción de dominio 66 locales comerciales en pleno centro de Bogotá, dedicados a la compra y venta de celulares robados.
Desde las primeras horas de la mañana de este jueves más de 500 policías con el apoyo del Escuadrón Antidisturbios de la Policía, 27 fiscales y personal de la Secretaría de Gobierno de Bogotá se tomaron varios centros comerciales ubicados en la Avenida Caracas con Avenida Jiménez.
Uno a uno fueron sellados estos locales comerciales y sus propietarios retenidos mientras se establece la legalidad de su actividad comercial.
“Estos operativos se van a extender a varias zonas de Bogotá. Seremos implacables con el comercio ilegal de celulares que tantas vidas ha cobrado”, afirmó Gloria Flórez, secretaria de Gobierno del Distrito.
A su turno, Andrea Malagón, jefe de la Unidad de Extinción de Dominio de la Fiscalía, explicó que en cumplimiento de la directriz del Fiscal General de la Nación, se está atacando no solo a quienes comercian con celulares robados o de dudosa procedencia, sino a los propietarios de estos establecimientos.
“La Fiscalía le va a puntar no solo a este flagelo sino a los propietarios de los establecimientos de comercio y que han sido negligentes en el arriendo de su local comercial”, dijo la funcionaria al explicar que los dueños de los locales “deben cumplir con la función social de la propiedad privada, y deben conocer a su arrendatario y saber a qué están dedicando su local comercial”.
Malagón agregó que esta es la segunda fase de la estrategia, la cual comenzó al semana pasada en el mismos sector. Allí fueron retenidas 11 personas, 77 locales ocupados y recuperados más de 6.500 celulares valorados en más de 2.400 millones de pesos.
“La acción de extinción de dominio es distinta a la acción penal contra esas personas”, señaló la Fiscal.
El operativo provocó serios enfrentamientos entre los comerciantes de la zona y el Esmad de la Policía. Hubo apedreas, gases lacrimógenos, quema de neumáticos y un trancón vehicular de grandes proporciones que se extendió por varias horas.
La Secretaria de Gobierno de Bogotá explicó que los locales objeto de extinción serán manejados por la Administración Distrital, que a través del Instituto para la Economía Solidaria (Ipes), los destinará en calidad de préstamo a comerciantes informales para que ejerzan su actividad de manera formal.
Mientras tanto, Nancy Patricia Gutiérrez, presidenta de Asomovil, el gremio que agrupa a las empresas de telefonía celular, respaldó los operativos de las autoridades.
“Estos operativos son necesarios. Una de las tareas en la lucha contra el robo de celulares está en manos de la Fiscalía y la Policía, que se encargan de adelantar estos operativos, y la tarea de las empresas de telefonía celular es registrar los teléfonos en las bases de datos negativas”, aseguró la dirigente gremial.
Por primera vez las autoridades ocuparon con fines de extinción de dominio 66 locales comerciales en pleno centro de Bogotá, dedicados a la compra y venta de celulares robados.
Desde las primeras horas de la mañana de este jueves más de 500 policías con el apoyo del Escuadrón Antidisturbios de la Policía, 27 fiscales y personal de la Secretaría de Gobierno de Bogotá se tomaron varios centros comerciales ubicados en la Avenida Caracas con Avenida Jiménez.
Uno a uno fueron sellados estos locales comerciales y sus propietarios retenidos mientras se establece la legalidad de su actividad comercial.
“Estos operativos se van a extender a varias zonas de Bogotá. Seremos implacables con el comercio ilegal de celulares que tantas vidas ha cobrado”, afirmó Gloria Flórez, secretaria de Gobierno del Distrito.
A su turno, Andrea Malagón, jefe de la Unidad de Extinción de Dominio de la Fiscalía, explicó que en cumplimiento de la directriz del Fiscal General de la Nación, se está atacando no solo a quienes comercian con celulares robados o de dudosa procedencia, sino a los propietarios de estos establecimientos.
“La Fiscalía le va a puntar no solo a este flagelo sino a los propietarios de los establecimientos de comercio y que han sido negligentes en el arriendo de su local comercial”, dijo la funcionaria al explicar que los dueños de los locales “deben cumplir con la función social de la propiedad privada, y deben conocer a su arrendatario y saber a qué están dedicando su local comercial”.
Malagón agregó que esta es la segunda fase de la estrategia, la cual comenzó al semana pasada en el mismos sector. Allí fueron retenidas 11 personas, 77 locales ocupados y recuperados más de 6.500 celulares valorados en más de 2.400 millones de pesos.
“La acción de extinción de dominio es distinta a la acción penal contra esas personas”, señaló la Fiscal.
El operativo provocó serios enfrentamientos entre los comerciantes de la zona y el Esmad de la Policía. Hubo apedreas, gases lacrimógenos, quema de neumáticos y un trancón vehicular de grandes proporciones que se extendió por varias horas.
La Secretaria de Gobierno de Bogotá explicó que los locales objeto de extinción serán manejados por la Administración Distrital, que a través del Instituto para la Economía Solidaria (Ipes), los destinará en calidad de préstamo a comerciantes informales para que ejerzan su actividad de manera formal.
Mientras tanto, Nancy Patricia Gutiérrez, presidenta de Asomovil, el gremio que agrupa a las empresas de telefonía celular, respaldó los operativos de las autoridades.
“Estos operativos son necesarios. Una de las tareas en la lucha contra el robo de celulares está en manos de la Fiscalía y la Policía, que se encargan de adelantar estos operativos, y la tarea de las empresas de telefonía celular es registrar los teléfonos en las bases de datos negativas”, aseguró la dirigente gremial.