Al menos 14 municipios del Táchira sufren desde inicios de esta semana una serie de constantes y prolongados apagones que generaron angustia y caos en diversas comunidades. San Cristóbal, Bolívar, Cárdenas, Capacho Nuevo, Capacho Viejo, Junín, Andrés Bello, Ayacucho, Jáuregui, Bolívar, Ureña y la zona sur del estado, entre otras localidades de la geografía tachirense reportaron fallas en el suministro de energía eléctrica.
Las fallas comenzaron cerca de las 2:00 de la madrugada del martes y en algunos sectores, salvo leves lapsos con el servicio inestable, los apagones aún continuaban este miércoles.
Las interrupciones eléctricas afectaron el normal desenvolvimiento de las actividades, pues estuvieron acompañadas de fallas en el sistema de datos telefónicos e internet, lo cual repercutió en el funcionamiento de los puntos de venta y las comunicaciones en general.
Adriángela Álvarez, es propietaria de una tienda de bisutería virtual. “Estaba organizando un concurso por el día del amor y la amistad y tuve que posponerlo porque no tenía luz ni internet y no había forma de interactuar con los clientes”, dijo.
En sectores de San Cristóbal como Pueblo Nuevo, La Machiri o Los Teques, vecinos reportaron al menos tres cortes entre cinco y nueve horas de duración, para un total de 22 horas sin electricidad. Eberth Bruguera señaló que en el municipio Junín, el apagón del día martes comenzó a las 5:00 am y a las 9:30 pm continuaban sin electricidad. Situación similar reportaron habitantes de Capacho Viejo y capacho Nuevo, donde se contabilizaban más de 6:00 horas sin luz la tarde del mismo día.
“Mi familia si no tiene electricidad tampoco tiene agua”, expresó María Burguera, quien reside en un edificio de apartamentos, donde requieren el uso de motobombas para hacer llegar el agua desde los tanques subterráneos hasta los apartamentos.
Raquel Sánchez, madre de un bebé de 3 meses, contó cómo las fallas constantes de energía han modificado las rutinas diarias con su pequeña. Relató cómo el baño antes de dormir se altera cuando no hay energía eléctrica, pues manipular un bebé en la oscuridad puede ser de riesgo. Además dijo que la falta de electricidad impide todas las labores de atención como lavar su ropa, sus biberones y el aseo de sus enseres.
La solución es a largo plazo
"Un equipo especializado con buzos de la armada venezolana están trabajando para solventar una fuga de agua de 17 mil litros por segundo, que lleva ya tres años, lo que no permite la generación eléctrica necesaria en la región".
Así lo señaló Freddy Bernal, diputado a la Asamblea Nacional, durante un programa de radio en el que hizo referencia a la situación eléctrica de la entidad. Reconoció que se necesitan grandes inversiones para estabilizar el sistema eléctrico en la región y aseguró que el gobierno venezolano no cuenta con tales recursos.
"Esa falla que hay en la Vueltosa de más de 3 años no permite producir toda la energía que se necesita. Estamos haciendo un esfuerzo para ver si logramos una producción de 300 megavatios antes de junio, podríamos cubrir el 100% de la energía en el estado Táchira", reiteró.