A las 9:00 de la mañana del Viernes Santo, los vecinos de la avenida 18 con calle 5, del barrio El Desierto, no aguantaron más el olor nauseabundo que salía de la parte trasera de la vivienda en donde vivía Luis Ángel Avincula Ramos y alertaron a las autoridades de que algo malo le habría ocurrido, luego de no verlo por varios días.

Cuando unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta llegaron al sitio y se percataron de que dentro de la habitación yacía un cuerpo sin vida, pero debido a que la vivienda estaba cerrada con candado, tuvieron que violentar la puerta para poder ingresar y al verificar el hecho, de inmediato acordonaron el lugar para que arribara la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho).

Cuando los peritos llegaron confirmaron que el cadáver hallado se trataba de Avincula Ramos, de 65 años, quien fue visto por última vez el martes 30 de marzo. El cuerpo estaba envuelto entre sabanas y cobijas.

La víctima, oriunda de Zarzal (Valle del Cauca), tenía dos heridas que le fueron causadas al parecer con un cuchillo.

Según se pudo conocer, una de las heridas la tenía en la parte del cuello, mientras la otra estaba en su pecho.

Aunque las autoridades están investigando los móviles de este hecho, se conoció que el hombre habría tenido una discusión, días antes de no volverlo a ver, con unos allegados extranjeros que residían en la misma casa, en donde estaban arrendados.

Algunas personas que conocían desde hacía 5 meses al hombre, aseguraron que lo veían desempeñarse como prestamista en Cenabastos.

Por ahora se desconoce las identidades de los presuntos sospechosos de este homicidio.