El Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) y Centrales Eléctricas de Norte de Santander (CENS-EPM) crearon una alianza para lograr el posicionamiento femenino en el sector eléctrico, con el objetivo de incorporar a más mujeres en este campo que, tradicionalmente, ha sido ocupado solo por hombres.
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Gracias a esto, desde el mes de noviembre de 2022, 25 mujeres de Norte de Santander se están formando como técnicas en Electricidad Industrial, con el fin de que cada una de sus aprendices conozca cómo diagnosticar, instalar, montar y realizar labores de mantenimiento en componentes electromecánicos, sistemas eléctricos, máquinas eléctricas, entre otros.
Aunque el programa ha estado abierto siempre para hombres y mujeres, en este caso la convocatoria se hizo exclusivamente para damas, destacando que se recibieron 94 hojas de vida que fueron revisadas minuciosamente para asignar los cupos.
José Miguel González, gerente de CENS-EPM, manifestó que con este proyecto están dando el primer paso para impulsar la mano de obra de las mujeres de la región en este campo de le electricidad industrial.
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“Nosotros estamos convencidos en CENS de que las mujeres son una palanca absolutamente relevante en la gestión de las compañías y de los territorios, y por eso venimos trabajando en varios proyectos de equidad de género. Hace unos meses, cuando hicimos un análisis de cuáles eran las brechas que teníamos, encontramos que en las áreas técnicas, que son las que se encargan de operar y mantener la infraestructura, solo operaban hombres, por lo que pensamos en una iniciativa para también tener a mujeres”, dijo González.
Por esta razón, en articulación con el SENA y, además con la Universidad Libre de Cúcuta, se comprometieron a ofertar esta carrera, sin dejar que ninguna mujer abandone sus estudios, teniendo en cuenta que muchas son de bajos recursos y cabezas de hogar, y al ser el soporte de la familia, pensar en trabajar y estudiar al tiempo puede representar un verdadero desafío.
Para esto, durante los 9 meses de etapa lectiva, CENS-EPM estará entregando un apoyo económico que corresponde al 50% de un salario mínimo, además de garantizarles toda la dotación para el desempeño de sus labores y, así mismo, al momento de llegar a la etapa productiva y/o de práctica, las mujeres se vincularán directamente con una empresa aliada de las entidades involucradas.
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“El campo de acción es grande, entonces no solo van a poder trabajar en una de nuestras subestaciones, sino que pueden ser técnicas en alguna fábrica que tenga actividades y procesos que involucren la energía eléctrica y sabemos que esto va a tener un impacto muy importante en los resultados de las compañías del futuro”, agregó González.
Por su parte, Wilmar Cepeda, director regional del SENA en Norte de Santander, calificó este día como histórico, ya que es el primer grupo de mujeres que logran consolidar en esta técnica.
El funcionario precisó que aunque tenían el temor de que ninguna mujer se postulara para esta oferta, con esta alianza le apuestan a la equidad de género para hacer algo diferente.
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“Es un día de felicidad, porque nosotros les aseguramos a las mejores técnicas en electricidad industrial, para que muy pronto estén integrando las filas de muchas empresas del sector eléctrico de nuestra región y en otras partes del país, siendo un hito de mujeres que muy pronto las van a ver subidas en un transformador, en una subestación eléctrica, haciendo hombro a hombro en igualdad de derechos y condiciones con los hombres, trabajos eléctricos”, precisó Cepeda.
La Universidad Libre será la encargada de formarlas en un programa de ‘Posicionamiento en entornos masculinizados’, para que aprendan sobre la importancia de la igualdad de género y el liderazgo femenino y, también, en como empoderarse social y económicamente.
Ayer se entregaron las 25 dotaciones que incluían cascos, botas, uniformes, entre otras herramientas indispensables para la labor como técnica en Electricidad Industrial.
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