Tres mujeres; tres generaciones; madre, hija y nieta, y además un hombre de 40 años, son las víctimas mortales que dejó este fin de semana la segunda temporada de lluvias del año en Norte de Santander.
Esta vez el epicentro de la tragedia fue el municipio de Cucutilla, precisamente en el sector de Puerto Torres (vereda El Topón), en donde el amanecer del domingo dejó sin vida a María Celina Jaimes (de 78 años), Claudia Patricia Jaimes Contreras (46 años) y Johana Valentina Ortega Jaimes (de 13 años).
Según el reporte de las autoridades, las mujeres se encontraban en la cocina de su vivienda cuando una piedra se desprendió desde la parte alta de la montaña y las sorprendió cuando estaban preparando el desayuno, sobre cerca de las 6:30 a. m.
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El desprendimiento de la roca se presentó debido a las fuertes lluvias que están azotando el departamento. Al parecer, el mismo terreno hizo que la roca produjera un salto y fue así como terminó en la cocina, rompiendo una pared y matando a las tres mujeres.
Tras el accidente, uniformados de la Defensa Civil y la Unidad Municipal de Gestión del Riesgo se trasladaron al sitio para hacer frente a la situación y empezar la tarea de buscar los cuerpos, los cuales fueron hallados en medio de una escena que tiene en luto a gran parte del departamento.
El alcalde de Cucutilla, Juan Carlos Pérez, le aseguró a La Opinión que también hizo presencia en el lugar, lamentando la penosa situación que se presentó en su municipio.
Los cuerpos fueron trasladados a la capital nortesantandereana al Instituto Nacional de Medicina Legal, en donde fueron entregados a sus familiares después de dictaminar las causas de los decesos.
Lo que se sabe del sitio
Según conoció La Opinión, la vivienda se ubica en un punto de encuentro en donde converjan las veredas de Román, La Meseta, Alto del Tigre. Según manifestaron vecinos, es el lugar preferido por los campesinos para esperar el transporte hacia Cucutilla o Arboledas. Además, allí funcionaba una tienda.
“Ellos (la familia Jaimes) estaba dedicada a cultivos de café, caña y algo de cítricos. Don Ciro Jaimes vivía con ellas porque sus otros hijos ya se habían ido para Cúcuta, es una persona muy apreciada por la comunidad, es un líder”, le dijo a esta redacción Iván García, periodista y vecino de Cucutilla.
Esta zona, por su posición geográfica pertenece a Cucutilla, pero el casco urbano de Arboledas es más cercano, por lo que Johana Valentina estudiaba en el colegio San Juan Bosco, de Arboledas.
Sobre las honras fúnebres, aún no hay información, pero el sector donde ocurrió la tragedia se identifica eclesiásticamente con la parroquia Santísima Trinidad, de Arboledas, por lo que vecinos coinciden en que los honores póstumos se realizarían en este municipio.
La otra víctima, en Arboledas
Las fuertes lluvias en los municipios del centro-occidente de Norte de Santander dejaron otra víctima en el municipio de Arboledas el mismo domingo, cuando Jesús Belén Laguado Villamizar, de 40 años, perdió la vida al querer pasar una quebrada.
Los hechos se presentaron en la vereda Potreros, sobre el caudal de una quebrada que Laguado Villamizar intentó cruzar después de disputar un partido de fútbol con sus amigos.
El cuerpo del habitante de la zona estuvo desaparecido durante la noche del domingo, siendo encontrado en la mañana de ayer por sus propios familiares, según informaron fuentes a esta redacción.
Consejo Departamental de Gestión del Riesgo, reunido
Tras los sucesos del domingo, ayer el gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano Guerrero, convocó a todos los integrantes del Consejo Departamental de Gestión del Riesgo, en el marco de un Puesto de Mando Unificado (PMU), para revisar las calamidades ocasionadas por la segunda temporada de lluvias.
Según la Gobernación, la segunda temporada de lluvias aumentaron las emergencias por efectos de avenidas torrenciales que causaron inundaciones, deslizamientos, derrumbes y obstáculos en las vías del departamento, afectaciones a la infraestructura educativa, pérdida en el sector agropecuario, así como los sucesos de Cucutilla y Arboledas.
Desde la administración municipal reiteraron que se hace seguimiento y se brinda acompañamiento a las familias afectadas, reiterando la necesidad de coordinar acciones con las alcaldías del departamento.
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Otra zona del departamento que está en emergencia por cuenta de las lluvias es El Catatumbo, principalmente el corregimiento de La Gabarra, en donde hay más de 80 afectados. Entre tanto, la comunidad Motilón Barí también lanzó el llamado de alerta debido a las fuertes precipitaciones y desbordamiento de afluentes.
A hoy, 26 municipios han declarado la Calamidad Pública y el pronóstico del Ideam señala que habrá más lluvias en los diferentes municipios de Norte de Santander.
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