Los 40 municipios del Departamento Norte de Santander se encuentras en emergencia por las lluvias. La ola invernal a la fecha ha dejado siete fallecidos, 3.302 familias damnificadas, 220 evacuadas preventivamente, 2.053 viviendas colapsadas y 325 tramos viales con daños de estructura. Esto según un informe de la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres.
La vías han sido las que se han visto más comprometidas por los estragos que han dejado procesos de remociones de masa, los colapsos de estructura y las crecientes súbitas. Sin embargo, hay importantes afectaciones en las zonas rurales que dejan más de 11.319 hectáreas con destrucción de cultivos principalmente de yuca, plátano, cacao, palma de aceite, arroz, lulo, fresa, tomate de árbol, arvejas papa y maíz, entre otros.
La mayor adversidad que en este momento enfrentan las administraciones locales es la falta de presupuesto, pues los daños superan la capacidad de inversión y es por esto que la Gobernación, a través de la Consejería Departamental plantea solicitar un Puesto de Mando Unificado Nacional “donde podamos solicitar el apoyo tan necesario en este momento para el Departamento que tanto lo necesita”, dijo Adriana Arias, consejera para la Gestión del Riesgo.
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El Norte de Santander ocupa en este momento el quinto lugar de emergencias por la ola invernal que inició en marzo. Es por esto que este lunes se realizó el Consejo ampliado Departamental para la Gestión del Riesgo, en el que además de los alcaldes de los 40 municipios y coordinares de Gestión del Riesgo, estuvieron presentes autoridades de Corponor, Defensa Civil, Bomberos, representantes a la Cámara, diputados y congresistas.
“Realmente la palabra adecuada para determinar la situación es SOS en Norte de Santander por la temporada de lluvias”, dijo el gobernador del Departamento, Silvano Serrano.
Serrano hizo un llamado al Gobierno Nacional, a los ministerios de Transporte, Agricultura, Vivienda; al viceministerio de Agua Potable y a Invías para que atienda al llamado de urgencia que presentan el Norte de Santander.
“Requerimos que en este momento respaldo, porque los 40 municipios están sin vías terciarias, secundarias y hoy tenemos afectación en el corredor Cúcuta-Ocaña y en el corredor Cúcuta-Pamplona, Pamplona-Bucaramanga” expresó.
La crisis generada por la emergencia fue el motivo del consejo extraordinario en el que los alcaldes expusieron las graves afectaciones en cada municipio y sus solicitudes en materia de gestión para mitigar el riesgo en sus territorios.
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“Tenemos daños en las escuelas, acueductos, en las vías, en los cultivos. Hay municipios que están completamente aislados. Hemos dispuesto desde el gobierno departamental cuatro bancos de maquinaria que están en terreno. La Unidad de Gestión del Riesgo en diez municipios tiene maquinaria amarilla, ya llevábamos más de 20 mil millones de pesos de parte de la gobernación asignados con los alcaldes para atender estas emergencias, pero no somos capaces solos por eso hemos hechos este llamado angustioso para que se nos brinde apoyo desde el Gobierno Nacional”, expresó Serrano.
Catorce municipios
Son catorce los municipios que se han declarado en Calamidad Pública para la temporada de lluvias 2022. Estos son Salazar, Cáchira, Ocaña, Lourdes, San Calixto, Durania, Convención, Ábrego, Los Patios, Tibú, Chinácota, Mutiscua, Pamplonita y Bochalema.
El evento de mayor incidencia lo ocupan las remociones en masa que representan un 40% de la totalidad, seguidos de las inundaciones con un 24%, crecientes súbitas con un 17% y avenida torrencial con 14%.
La inversión total que se ha hecho en materia de atención a los daños en todo el departamento durante las últimas semanas asciende a los $16.713.133.628. Esta ha recibido aportes de la Gobernación, de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y en un mínimo porcentaje de las administraciones locales.
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Algunos de los municipios beneficiados para atención de emergencias en sus vías son Toledo, Villa Caro y El Tarra con $100 millones de pesos cada uno; Hacarí con $60 millones de pesos y La Playa de Belén con $60 millones de pesos.
Para Villa Caro y Gramalote, se hicieron contrataciones por el orden de los $650 millones de pesos; $150 millones se destinaron a Convención y más de $1.146 millones para apoyar al municipio de Lourdes en la habilitación de puntos críticos.
Inversión de rehabilitación
Adriana Arias, consejera para la Gestión del Riesgo expresó que han hecho una importante inversión desde la Gobernación para apoyar la rehabilitación de las vías que son las más afectadas.
Una de ellas obras corresponde a la intervención de la vía Villa Caro-Gramalote, otra al arreglo de los gaviones colapsados en el barrio La Primavera del municipio Convención, además de rehabilitación de vías en Lourdes y para el enrocado de estribos en el Puente 21 de Tibú y en ese mismo municipio para el mantenimiento de los puentes de Río Sardinata y Nuevo Presidente.
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La funcionaria afirmó que la cifra total de afectados es mayor, pero que por el mismo estado en que se encuentran algunas zonas, los consejeros municipales no han podido ingresar.
Arias ratificó que la Gobernación ha agotado su capacidad de respuesta ante estas emergencias. “Necesitamos el apoyo urgente del ente nacional”, agregó.
Desde el ente regional están solicitando al Gobierno Nacional se envíe ayuda humanitaria para todas las familias afectadas por las lluvias y materiales para rehabilitar las viviendas colapsadas. “Hemos radicado proyectos ante la Unidad Nacional para gestionar los recursos con los que no cuentan las alcaldías para mitigar los riesgos en sus municipios”, explicó la consejera.
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