Los videos de al menos siete cámaras de seguridad, alrededor del lugar donde la tarde del sábado asesinaron de manera indiscriminada a Luis Arturo Marín Ramos, en La Parada (Villa del Rosario), serán fundamentales para que las autoridades puedan avanzar en la identificación de los pistoleros.

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Los homicidas aprovecharon que la víctima, que era conocida como ‘Arturo’, se sentó frente a una recicladora, donde trabaja uno de sus hermanos, después de entregarle una comida para acercársele y dispararle sin piedad, en al menos quince oportunidades.

“Fue impresionante. Salimos corriendo, porque no paraban de sonar los disparos y luego vimos que ese señor quedó ahí muerto”, recordó un habitante de Villa del Rosario, que pasaba por la autopista internacional sobre La Parada, en este sitio rodeado de bares y estancos.

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Los pistoleros accionaron sus armas directo a la cabeza, el pecho, los brazos y la espalda de Luis Marín.

El hecho ocurrió a las 6:10 de la tarde del Sábado Santo. Alrededor del lugar había personas tomando licor, por lo que todo se transformó en silencio y temor.

Los comerciantes y visitantes de la zona alertaron a la Policía Metropolitana de Cúcuta de lo que había ocurrido, por lo que rápidamente empezaron a llegar las patrullas para iniciar las primeras pesquisas.

Miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargaron de la inspección y el levantamiento del cadáver que fue trasladado al Instituto de Medicina Legal.

Los familiares de la víctima dijeron a la Policía no saber de amenazas o problemas que pudieran desencadenar en el crimen.

Otros hechos recientes

A mediados de marzo, en un hotel de La Parada, a pocos metros de donde ocurrió el asesinato de Luis Arturo Marín, murió también a balazos Anderson Andrés Ferrer Quintana, de 23 años, que fue perseguido por los asesinos hasta quedar sin vida en el establecimiento.

El pasado 9 de febrero, a pocos metros de donde ayer fue asesinado Anderson Ferrer, también fue atacado a balazos Amalio José Beltrán Arginzones, cuando llegó a cumplir una cita.

La víctima arribó al lugar, al parecer, a cumplir un llamado de integrantes del Tren de Aragua, que delinquen en este municipio del área metropolitana de Cúcuta. Amalio José trabajaba vendiendo pasajes alrededor de la trocha Los Mangos.

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