El reconocido refrán ‘por la boca muere el pez’, habría aplicado para Ricardo Antonio Arévalo, conocido como ‘Scooby’ o ‘Chino’, quien a través de una nota de voz de WhatsApp, le confesó a uno de sus cómplices que asesinó al intendente de la Policía Tomás Andrés Paredes, el viernes 21 de enero, en el barrio Prados del Este.
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“Estoy esperando que amanezca pa’ buscar manera de irme de acá de Cúcuta, porque, qué hago, si me entiende, no maté a un tipo normal, maté fue a un ‘tombo’ y un superintendente de la Policía, mandaba a todos los patrulleros (SIC)”, se escucha en la grabación que conocieron las autoridades.
Arévalo tenía muy claro que estaba siendo buscado por el homicidio del suboficial, pues su identificación fue muy fácil, porque el crimen quedó grabado en unas cámaras de seguridad, además, las autoridades ya le seguían el rastro por varios atracos que ya había cometido anteriormente.
“Tengo un poco de gente volteada, están pagando recompensa por mí, me cargan en todos los grupos de WhatsApp de la Policía, me cargan en el Facebook, en todos lados; pero normal, usted sabe cómo es, caucho más nada (SIC)”, terminó diciendo ‘Scooby’.
Este audio, al igual que otros dos que se conocieron hace algunos días, en el que este mismo hombre aseguraba estar ‘encaletado’ tratando de evadir a las autoridades, dan cuenta del riguroso seguimiento que le tenían miembros de la Sijín para no permitir que se escapara sin responderle a la justicia por los delitos que ha cometido.
Además, una fuente judicial contó que luego del reconocimiento físico que hicieron con los videos, un informante les señaló que quien disparó fue ‘Chino’, por eso un grupo de investigadores lo puso en la mira para recopilar las pruebas suficientes y que así la Fiscalía lograra el aval de la orden de captura en su contra.
La captura
La noche del jueves, cuando algunos investigadores de la Sijín fueron alertados de que Arévalo estaba con otro hombre y una mujer, identificados como Yeinner Stiven Cay Gélvez y Bianca Solange Pinto Buitrago, en el barrio Lleras Restrepo, al parecer, alrededor de donde se estaban hospedando, de inmediato alistaron un operativo para capturarlo.
Un informante les señaló a los policías que las tres personas estaban reunidas planeando algo y que además estaban armadas.
En un video aficionado quedó registrado el momento de la captura, cuando los policías, vestidos de civil, atrapan al principal sospechoso de cometer el crimen del intendente Paredes.
“Teníamos información de que este hombre pretendía escapar hacia Venezuela y cuando fuimos alertados, de inmediato lo capturamos. De todas maneras, él estaba controlado”, dijo una fuente judicial cercana a las pesquisas.
Cuando una patrulla de la Sijín llegó, los tres sospechosos intentaron huir y esconder un bolso que tenía uno de ellos, pero rápidamente fueron detenidos.
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En el bolso que encontraron, los policías hallaron un pantalón, ocho camisetas, dos franelillas, ropa interior, documentos de identidad de una mujer, 14 balas de diferentes calibres y una granada.
Ante esto, los hombres de la Sijín los capturan por fabricación, tráfico y porte de armas, municiones de uso restringido, de uso privativo de las fuerzas armadas o explosivos, y ayer, al cierre de esta edición, eran presentados ante un juez para que definiera su situación jurídica.
El perfil criminal
Según se conoció, Ricardo Antonio Arévalo, oriundo de Venezuela, es un reconocido delincuente que se dedica a cometer atracos y a servirle a cualquier estructura ilegal que necesite hacer cobros a punta de sangre y fuego.
“Delinquía más que todo en el centro y en la zona de El Escobal, por eso ya se conocía por dónde se movía y a qué se dedicaba”, explicó la fuente judicial.
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‘Scooby’ o ‘Chino’ es recordado en la institución policial por haber atracado a otro uniformado y de participar en otros hechos delictivos.
Las hipótesis del asesinato
Por ahora, la principal hipótesis del móvil del crimen es un atraco, puesto que al intendente le robaron un arma y una cadena. Sin embargo, no se descartará cualquier otra versión.
“Al policía le robaron una pistola de uso personal y una cadena de oro. Sin embargo, el hecho del robo puede ser simulado y por eso no se puede desvirtuar nada. Hay que analizar cualquier otra situación personal o algo relacionado con su trabajo”, explicó recientemente una fuente.
