Tener un vehículo en buen funcionamiento en Táchira es posible, pero con mucho dinero. Pues el costo de mantenimiento para un automotor particular es elevado, al mes se podría llevar un presupuesto de hasta 400 dólares, según expresaron varios usuarios consultados en diversos talleres de San Cristóbal.
Los repuestos se cotizan en moneda extranjera, pero aun así no todas las piezas se consiguen en la entidad, motivo por el cual las personas deben atravesar la frontera y visitar las ventas de autopartes de Cúcuta para adquirirlos, esto a raíz de la caída del sector automotriz en Venezuela desde hace 10 años. Aunado a ello, gran parte de los mecánicos basan sus precios en pesos colombianos.
Debido a ello, en las redes sociales se puede observar una variada gama de vehículos, que fuera del país, muchas personas podrían pesar que están a "precio de gallina flaca", pero la realidad es que muchos tachirenses buscan salir de sus carros por el alto precio que representan sus mantenimientos.
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Para solo surtir el combustible de un vehículo pequeño, se requiere al mes de un presupuesto de 80 dólares, equivalente a 288.000 pesos, pero este combustible pese a tener un alto precio, llega de baja calidad y ocasiona mayores daños en los autos.
Por ello, las limpiezas de inyectores, cambio de filtro de aceite, filtro de la gasolina, reemplazo de bujías, entre otros ajustes, deben hacerse con mayor frecuencia, aumentando los gastos.
De allí que ahora los vehículos pequeños, son los más cotizados en la región fronteriza, mientras que las grandes camionetas de alta cilindrada ahora tienen poca demanda en el mercado regional.
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"Casualmente, le acabo de hacer un mantenimiento general a mi carro y gasté únicamente en repuestos cerca de 400 dólares (1440.000 cop) no tenía nada dañado, nada más en mantenimiento: kit de tiempo, bomba de gasolina, bujías...", relató Luis Farias en pleno taller cuando realizaba un mantenimiento al sistema de frenos de su carro.
Farias contó que gran parte de las personas no tiene cómo mantener un auto, muchos ya están abandonándolos por falta de poder adquisitivo, motivo por el cual prefieren venderlos.
En municipios fronterizos del Táchira, las personas están tomando como opción vender los vehículos a chatarreras ubicadas en la línea limítrofe, que paga por cada kilo de metal.
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Aunque varios mecánicos consultados por La Opinión en San Cristóbal consideran que las personas deben efectuar los chequeos y ajustes cada tres meses, los usuarios acuden al taller cuando ya el vehículo presenta alguna falla, algunos esperan semanas o meses para volver a repararlos y otros los "parapetean" para venderlos.
William Rincón, propietario de un vehículo Aveo, indicó que la gasolina que llega al Táchira tampoco ayuda, pues su vehículo constantemente registra fallas. Al mes mínimo 200.000 pesos se le va solo en el carro, si no falla.
"Para únicamente pagar la gasolina son como 70.000 pesos, por eso la gente los está vendiendo, porque no dan abasto para mantener un carro. Es mejor andar en buseta. O se mantiene el carro o se sostiene a la familia", dijo Rincón.
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Merlis de Méndez contó cuando pasa por cualquier taller observa cantidades de carro en mal estado, pues asegura que gran parte del parque automotor de la región presentan fallas en su funcionamiento, males que son achacados a la gasolina.
"Mensualmente, se le va a uno como 500.000 pesos, sumando la gasolina", precisó Méndez.
El vendedor de repuestos, Josmer Mogollón, indicó que por el momento el costo de los auto repuestos se han estabilizado, pero a los empleados públicos se les hace imposible el pago de los mantenimientos básicos a un vehículo.
“Lo más básico es tener dinero, esa es la realidad de lo que se vive en el país. La gasolina en nuestro estado es costosa, tener vehículo no es fácil, hablando de cauchos, constantemente se espichan por defectos en la carretera”, describió el cauchero William Sanguino.
Sanguino explicó que venden cauchos usados en 50.000 pesos, la reparación de una llanta oscila entre 5000 y 10.000 pesos. Mientras cauchos nuevos en la medida más económica se consiguen a partir de 140.000 pesos, dependiendo de la marca.
Sin mencionar el precio de lo que representa la reparación de un motor, ahí los precios se disparan a la estratosfera.
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