La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Cúcuta
Aprender sobre la ‘comida chatarra’, un propósito del año escolar
Red Papaz recomienda que los entornos escolares deben ser saludables sin presencia de productos empaquetados o ultraprocesados.
Image
logo
La Opinión
Domingo, 22 de Enero de 2023

 

Muchos niños de Norte de Santander dependen de los programas de alimentación escolar para obtener sus desayunos y almuerzos, los cuales motivan a los padres de familia a mantener a sus hijos en la escuela y brindan a los alumnos los nutrientes necesarios para estar sanos y poder desarrollar una jornada escolar de acuerdo con sus niveles académicos.

Sin embargo, no existe una cultura relacionada con la nutrición y los buenos hábitos de comida en los estudiantes, situación que se vio reflejada en la última Encuesta Nacional de Situación Nutricional  (Ensin 2015) donde se evidencia que en Colombia el porcentaje de sobrepeso en menores de 5 años supera el promedio mundial.

Por esta razón, en el país se viene debatiendo desde el 2017, una iniciativa para buscar que los alimentos ultraprocesados ofrezcan de forma clara la información nutricional y que se ve representada en la llamada ‘Ley Comida Chatarra’.


Lea: Más de 7.600 adultos mayores ha recibido el asilo Rudesindo Soto


Este proyecto de ley, aprobado el pasado 17 de junio del 2021, tiene como objetivo exigir unas etiquetas frontales en todos los alimentos ultraprocesados, disponibles en las tiendas y supermercados, con el fin de advertir a los consumidores sobre los excesos de grasas, sodio y azúcares que contienen.

De esta forma, los colombianos tendrán nuevas alternativas informativas a la hora de tomar decisiones sobre su comida, evitando el riesgo de sufrir enfermedades como hipertensión, diabetes, obesidad, osteoporosis o cualquier otro tipo de enfermedad crónica.

Según menciona Carolina Piñeros Ospina, directora ejecutiva de Red Papaz, entidad que aboga por la protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en Colombia, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que los países debieran adoptar por mínimo cuatro políticas en la aplicación de leyes y regulaciones que reduzcan la demanda y la oferta de productos que contienen cantidades excesivas de nutrientes críticos.

“Se sugiere el uso de etiquetados nutricionales que adviertan a las personas cuando estos productos son altos en algunos componentes, es decir, que tienen excesos de ingredientes dañinos. El segundo es la creación de un impuesto a este tipo de comidas; el tercero tiene que ver con los entornos escolares saludables sin presencia de productos empaquetados o ultraprocesados y finalmente, el control a la publicidad y marketing en colegios y medios de comunicación”, señaló Piñeros.


Conozca: ¿En Cúcuta responden por daños a vehículos en parqueaderos privados?


Habitualmente, la industria de alimentos usa la tabla nutricional para indicar la cantidad de grasas, azúcar, sodio y calorías que contienen sus productos. Sin embargo, de acuerdo con Red PaPaz, organización que lidera la estrategia #NoComasMásMentiras “este etiquetado no es suficiente, ya que el promedio de los colombianos no sabe qué porcentaje es dañino ni cómo funcionan estos nutrientes”.

Imagen eliminada.

 

El etiquetado

Para el 2021, el Ministerio de Salud y Protección Social que para ese entonces estaba en cabeza de Fernando Ruiz, estableció mediante la Resolución 810 de 2021 un reglamento técnico sobre los requisitos de etiquetado nutricional y frontal que deben cumplir los alimentos envasados o empacados.

Aunque dicha medida empezó a regir 18 meses después de su publicación, el Gobierno impulsó un etiquetado circular basándose en la experiencia de otros países y que según ellos, cumple como implementación.

Conforme relata la directora de la Red,  se ha abogado por una reglamentación del etiquetado basada en la mayor evidencia científica el cual expresa que  la figura implementada hasta la fecha no es comprensible de leer y puede causar confusión, generando un conflicto de intereses entre las industrias.

“Según un estudio realizado por la Universidad Nacional de Colombia, la Universidad de Carolina del Norte y la Pontificia Universidad Javeriana, la evidencia más reciente demuestra que el octágono es el símbolo más eficiente  para identificar correctamente los productos comestibles y bebibles que contienen nutrientes críticos en exceso, en comparación con otras formas de etiquetado”, mencionó.


Entérese: ¿Cuánto pagarán los cucuteños por la lista de útiles este 2023?


De ese mismo estudio se concluyó que “exceso en” es el texto el más apropiado para llamar la atención sobre el contenido de los empaquetados y que el color negro también es el más pertinente para los sellados frontales.

Por tal motivo, el pasado 13 de diciembre, el Minsalud anunció la expedición de la Resolución 2492 con la que reglamenta la Ley 2120 de 2021,  atendiendo el fallo del Consejo de Estado en el que se instó a definir las reglas de juego para implementar el etiquetado frontal de la comida chatarra.

En esa línea, la jefe de la cartera de Salud del gobierno de Petro, Carolina Corcho, señaló que adultos, niños y niñas, podrán encontrar, de ahora en adelante, estos sellos en los empaques de los productos ultraprocesados para que se informen mejor sobre los alimentos que consumen.

La cartera precisó que aquellas empresas que ya hayan incluido el sello circular en sus productos, tendrán seis meses (junio 2023) para agotar las etiquetas existentes. 

Imagen eliminada.

 
¿Qué es la ‘comida chatarra’?

De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la ‘comida chatarra’ como comúnmente se le denomina a estos alimentos, contiene pocos alimentos enteros o ninguno, tienen alto contenido calórico y bajo valor nutricional, se caracterizan por ser altos en grasas, sodio (sal) o azúcar y son bajos en fibra alimentaria, proteínas y micronutrientes (vitaminas y minerales).

En este grupo están: papas fritas, helados, chocolates y caramelos; panes y tortas empaquetadas; cereales azucarados para el desayuno; mermeladas; bebidas gaseosas y energizantes; jugo o zumo de fruta; bebidas de chocolate. También, los productos empaquetados listos para calentar o freír como nuggets, sopas, pastas y postres en polvo o envasados, entre otros.

Imagen eliminada.

 

La importancia de una buena alimentación 

Para Ninoska Rodríguez, nutricionista y dietista, registrada en la plataforma DoctorAki, los etiquetados frontales permiten que las personas puedan tomar decisiones informadas y consumir los productos conociendo realmente su contenido.


Más información: En Cúcuta, el PAE empezaría el 23 de enero, pero solo por unos días


Aquí algunos consejos entregados por la profesional de la salud para tener hábitos alimenticios saludables:

 

  • Moderar el consumo de sal

Es necesaria para el organismo, pero su uso excesivo puede causar problemas como retención de líquidos e hipertensión. En su lugar, se pueden utilizar otros condimentos que ayudan a resaltar los sabores de los alimentos como ajo o cebolla, cúrcuma, canela (evitar si la persona es hipertensa diagnosticada) y pimienta.

  • Poco dulce

Crear un hábito y disminuir progresivamente la cantidad de endulzante (azúcar, miel o panela) que normalmente se utiliza en las comidas. En su defecto, se puede emplear el uso de edulcorantes no calóricos como la estevia o el sirope de yacón.

  • Adiós a los fritos

Siempre que se pueda, sustituir las frituras o apanados por preparaciones más saludables como: asadas, sudadas, al vapor u horneadas. Si se tiene la necesidad de utilizar aceite porque se preparará una receta especial, tratar que este sea de aguacate, extra virgen u oliva. El aceite de coco no se recomienda porque tiene alto contenido de grasas saturadas y por esto su ingesta debe ser limitada.

  • Sello natural

A la hora de mercar, procurar comprar alimentos elaborados con ingredientes de origen natural y que tengan un buen balance entre grasas buenas, proteínas y fibra. Procurar minimizar el consumo de alimentos altos en carbohidratos y con poca o nada de fibra.

  • Evitar las comidas de paquete

Estas opciones, por lo general, son elaboradas con harinas refinadas y tienen exceso de colorantes, preservantes y saborizantes artificiales. Se deben sustituir por alternativas más saludables como fruta picada o frutos secos.

  • Cuidado con lo que se bebe

Eliminar de la alimentación las bebidas procesadas como las gaseosas, instantáneas y los jugos de paquete (pasteurizados). Comúnmente, estas opciones pasan por un proceso de choques térmicos y la adición de grandes cantidades de azúcar que sobrepasan el valor diario recomendado para la población quitándoles todo su valor nutricional.

Imagen eliminada.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion 

Temas del Día