“Ya nos cogió la noche y tenemos que definir de manera urgente lo de la instalación del campamento de las Farc aquí en Caño Indio”.
Con estas palabras, Diego Bautista, de la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, dio inicio ayer en Caño Indio (Tibú) a la reunión con la comunidad de esta zona del Catatumbo, en la que en las próximas tres semanas tendrán que estar concentradas las Farc para iniciar su proceso de dejación de armas y reincorporación a la vida civil.
“Aquí no se va a alterar la vida normal de la comunidad. Las autoridades seguirán siendo las mismas y ustedes podrán transitar por donde quieran con libertad. Solo no podrán entrar al campamento de las Farc, por razones que son apenas obvias”, agregó Bautista.
En Caño Indio, a diferencia de las otras Zonas Veredales Transitorias de Normalización (ZVTN) que hay en el país, el Gobierno no ha logrado ponerse de acuerdo con la comunidad en dos temas que son esenciales para que las Farc puedan llegar allí: el plan de sustitución que adoptarán para los cultivos de coca y la forma en que se arrendarán los predios donde se instalará toda la logística necesaria para que la implementación del Acuerdo alcanzado entre esa guerrilla y el Gobierno empiece a andar.
“El tema de los arriendos de los predios que necesitamos para la logística lo vamos a adelantar con las cuatro familias propietarias de las zonas donde se instalarán las Farc y el Mecanismo de Verificación tripartito (Gobierno, Farc y Naciones Unidas)”, señaló Bautista.
Sin embargo, frente al tema de la sustitución de cultivos la cosa no parece fácil.
Pastor Alape, miembro del Secretariado de las Farc que llegó a la zona para participar de la reunión con la comunidad, señaló que en Caño Indio no hay nada aún montado ni acordado y el día D+5, que fue ayer, marcó el inicio de los desplazamientos de los guerrilleros hacia las ZVTN, lo que los obliga a actuar con celeridad.
“Aquí no hay nada, como se puede ver. Por eso es importante que el Gobierno avance con celeridad en el tema del plan de sustitución de cultivos de uso ilícito con la comunidad, que está a la espera de las propuestas que se le planteen para ver si les son viables o no”, dijo.
En ese sentido, el miembro del Secretariado de las Farc agregó, en broma, que “me han dicho que el Catatumbo está lleno de coca. Nos va a tocar decirle a Venezuela que nos preste un pedazo para concentrar a los guerrilleros porque nosotros no podemos estar en zonas donde haya presencia de cultivos de uso ilícito”.
Este tema, crucial para que los guerrilleros puedan concentrarse en Caño Indio, pareciera estar lejos de encontrar una solución.
La Asociación de Campesinos del Catatumbo (Ascamcat), que tomó la vocería en la mesa que se instaló con los delegados del Gobierno, las Farc, la Fuerza Pública y las Naciones Unidas, para tratar el tema de la sustitución de cultivos, presentó un proyecto en el que se destacan dos propuestas:
1. Entregar 3 salarios mínimos mensuales legales vigentes, por 36 meses, a las familias propietarias de los cultivos de coca, y dos salarios mínimos, por 18 meses, a las familias trabajadoras en estos cultivos.
2. Entregar mercados y bonos canjeables por alimentos, por 36 meses, a las familias que se acojan a este plan de sustitución de cultivos.
Ante la pregunta del director para la Atención Integral de la Lucha contra las Drogas de la Presidencia de la República, Eduardo Díaz Uribe, sobre cuándo sería el día exacto en que los campesinos de la zona empezarían el plan de sustitución de cultivos, Ascamcat le respondió que cuando se entregue la primera remuneración, la comunidad se compromete a romper todo vínculo con los cultivos de coca y el dinero generado de los mismos.
No obstante esta respuesta, Díaz Uribe sostuvo que esta fecha tiene que precisarse de manera exacta, pues no sería bien visto que el Estado llegase a la zona, con equipos de verificación internacional, y los cultivos de coca estuviesen allí.
“Para algunos, eso se entendería como que el Gobierno de alguna u otra manera estaría avalando estos cultivos y eso no puede ser”, enfatizó.
Al finalizar la tarde, la reunión fue suspendida sin que se llegase a algún acuerdo y quedó fijado un nuevo encuentro para hoy a partir de las 6:30 de la mañana
“De aquí nos tenemos que ir mañana (hoy) o el viernes con el tema de los arriendos de los predios y el plan de sustitución de cultivos de coca resueltos. A eso fue que vinimos y no nos podemos ir sin terminar esa tarea”, agregó Diego Bautista.
Junto a Pastor Alape estuvieron, por parte de las Farc, Jimmy Guerrero (comandante del Frente 33), Sandra Ramírez (viuda de Manuel Marulanda Vélez, ‘Tirofijo’), Rafael Malagón (Frente 33), Juan Prometeo y una delegación del Frente 33 que interactuó, sin armas, con los miembros del Ejército que llegaron hasta Caño Indio a custodiar la reunión.