Si bien, con el paso de los años, la mujer ha ido ganando un lugar destacado en un escenario que hasta hace algún tiempo era casi exclusivo para los hombres, la política, en Colombia las brechas entre ambos géneros siguen siendo amplias, a pesar de las normas que obligan una mayor inclusión femenina.

Un estudio publicado recientemente por la Registraduría Nacional, en conjunto con el Consejo Nacional Electoral y la Mesa de Género de la Cooperación Internacional en Colombia, deja ver que la igualdad entre mujeres y hombres en los partidos políticos todavía no alcanza los niveles esperados.

Al analizar los resultados de las elecciones de 2014 (Congreso) y 2015 (gobernadores, alcaldes, diputados y concejales) y calcular indicadores como la inclusión de las mujeres en las listas a cargos de elección popular y el número de electas, así como la participación y formación política de las representantes de este género, el informe arrojó que el partido que mejor posicionado está al respecto es el Movimiento Político Mira, con apenas un 56,18.

El ‘Ranking de igualdad de mujeres y hombres en los partidos y movimientos políticos’ mide de 1 a 100 las diferentes variables, siendo 100 la calificación que obtendría un partido si presenta el valor ideal.

Esto quiere decir que a nivel político, la igualdad de género en el país apenas se ubica en un rango medio y tan solo dos partidos, el Mira y el Liberal, superan los 50 puntos de calificación al respecto.

En contraste, el Movimiento Autoridades Indígenas de Colombia (AICO) es en estos momentos el que menos participación les da a las mujeres. Su promedio de calificación, frente a los diferentes indicadores medidos, apenas arroja un 27,96.

Esto deja ver que en las dos últimas elecciones, AICO no cumplió  siquiera con el 30% que exige la ley.

Para la evaluación fueron medidos los trece partidos políticos que en estos momentos cuentan con personería jurídica en el país y quienes en su mayoría muestran que todavía están lejos de lograr un mayor protagonismo de la mujer en la escena electoral. (Ver gráfico1)

Mejor panorama al interior de los partidos

A pesar de que la participación de la mujer en la contienda política todavía dista mucho de un escenario ideal, un mejor panorama se registra frente al papel que esta desempeña en el manejo de la estructura de las colectividades y su vinculación con las actividades internas.

Y es que como lo han reconocido muchas dirigentes a nivel nacional y local, si bien la mujer es parte esencial del engranaje de un partido político, todavía hay cierto temor en dar el salto a la competencia, por lo que prefieren seguir tras bambalinas y ser las artífices de las campañas, pero no postular sus nombres.

Eso se refleja en los resultados del estudio adelantado por la organización electoral y la Mesa de Género, que analizó cuatro indicadores específicos:
 
Participación de las mujeres en cargos directivos a nivel de gobierno y administrativo.

Participación del presupuesto asignado en las actividades para las mujeres y en el funcionamiento de la dependencia u órgano encargado del tema de la mujer.

Existencia de una oficina u otro órgano encargado de esas actividades.

Desarrollo de actividades de formación política y sensibilización de los derechos de las mujeres.

Aquí, el Movimiento Político Mira sigue siendo el partido mejor calificado (81,40), toda vez que es el que mayor participación les da a las representantes del género femenino en sus diferentes espacios de decisión y dirección. (Ver gráfico 2).

La ASI, el Partido Conservador, el Liberal y el Centro Democrático, fueron otras colectividades que demostraron que las mujeres sí son protagonistas al interior de sus estructuras y organizaciones políticas.

Entre tanto, frente a esta variable, nuevamente los más rezagados siguen siendo el MAIS y el AICO que no lograron superar los 30 puntos de calificación, a pesar de que se muestran como los movimientos políticos más alternativos que figuran en el escenario electoral.

Al respecto, los encargados del ranking manifestaron que lo que se busca con este estudio es llamar la atención de los partidos y lograr el impulso de reformas en su interior que conduzcan a posicionar a las mujeres en  cargos de liderazgo dentro de las mismas estructuras de dirección política y administrativa.

“Lo que proponemos es  configurar institucionalmente escenarios de representación y participación de las mujeres y la inversión de rubros del presupuesto dedicados exclusivamente a actividades dirigidas a formar políticamente y en sus derechos a las mujeres afiliadas al partido y a la promoción del mismo como escenario de formación política para las jóvenes del país”, explicaron.

Justamente hace algunos días, dos magistrados del Consejo Nacional Electoral propusieron impulsar una norma que obligue a los partidos a rendir cuentas de lo que gastan para motivar la participación de las mujeres, los jóvenes y las minorías étnicas.

“Se busca que los partidos efectivamente inviertan dinero en investigación, capacitación y un verdadero empoderamiento de estas, y no solo en manteles y eventos”, planteó el magistrado Felipe García.

Poco protagonismo electoral

El indicador que más llama la atención en el estudio de la Registraduría, el CNE y la Mesa de Género es el que evidencia la escasa inclusión de las mujeres en las listas de candidatos a ocupar los diferentes cargos y corporaciones públicas del orden nacional, regional y local, y el poco número de electas.

Aunque el escenario ha mejorado, con relación a años anteriores, los resultados del ranking dejan ver que los partidos y movimientos políticos se han dedicado a cumplir exclusivamente con el 30% que estableció la Reforma Política de 2011, pero ninguno  ha procurado superar este margen. (Ver gráfico 3).

Esto lo demuestra el hecho de que de las 13 organizaciones políticas evaluadas, ocho alcanzaron una calificación que no supera los 32 puntos.

La colectividad que menos participación le dio a las mujeres en sus listas de candidatos y que por ende menos eligió a representantes de este género, fue el Movimiento Autoridades Indígenas de Colombia (AICO), nuevamente.

En vista de este panorama, a los partidos se les sugirió garantizar la paridad en las candidaturas, eliminando los obstáculos para la participación de las mujeres y dando apoyo político y financiero igualitario con el propósito de concretar su elección.

“Se espera que los partidos adquieran compromisos de reformar sus normativas internas para promover la participación política y el empoderamiento de las mujeres incluso más allá de lo que exige la ley, además de generar acciones en los programas políticos de sus candidatos y candidatas y que en últimas se vean reflejados en los planes de desarrollo de quienes resulten  elegidos”, recomendaron los encargados de la medición.

El ‘Ranking de igualdad de mujeres y hombres en los partidos y movimientos políticos’ se viene haciendo desde 2008 y fue diseñado como una forma de  hacer seguimiento al compromiso de los partidos y movimientos políticos para reducir las brechas de género.

En esta oportunidad, además de tener en cuenta los resultados de las elecciones legislativas de 2014 y las locales de 2015, se aplicaron entrevistas a los partidos y fueron revisados los estatutos y algunas resoluciones de las colectividades.

Mejoró el panorama en Norte de Santander

En Norte de Santander, las elecciones del 25 de octubre de 2015 dejaron ver una evolución de la mujer en  la escena política del departamento, en contraste con los resultados del certamen democrático de 2011.

Solo en las alcaldías, de tres mujeres que lograron imponerse en sus municipios hace cuatro años, en esta oportunidad la cuota femenina aumentó a siete, lo que representa un 17,50% del mapa político de la región.

Entre 2016 y 2019 gobernarán alcaldesas en Bochalema, Chinácota, Durania, Mutiscua, Ocaña, Ragonvalia y Sardinata.

La cifra de concejalas electas para el periodo 2016-2019, también aumentó a 79, diez más que en el periodo 2012-2015.

El lunar de estas elecciones fue la Asamblea, en donde las mujeres estarán ausentes estos cuatro años.