La exalcaldesa de Ocaña, Miriam del Socorro Prado Carrascal, quien fue destituida de su cargo en mayo de 2019, denunció que viene siendo víctima de constantes amenazas e intimidaciones, con el fin de que se vaya del municipio.

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Prado aseguró que en repetidas oportunidades le han dejado en su casa de campo panfletos en los que la conminan a abandonar la región y le manifiestan que no responden por sus familiares cercanos.

En el más reciente episodio, personas desconocidas habrían irrumpido en su finca y con arma de fuego dispararon a los portones de la vivienda.

La exmandataria contó que desde que comenzó la pandemia se mantuvo encerrada en Bogotá, pero que recientemente decidió regresar a Ocaña y desde entonces empezó a ser objeto de amenazas, además de matoneo en redes sociales, injurias y calumnias.

“No tengo montones de plata como la gente se lo imagina. Con la frente en alto y la conciencia tranquila he vuelto a mi tierra. Si alguno tiene un reparo, ahí están los entes de control, la Fiscalía y la Procuraduría para instaurar los respectivos denuncios”, manifestó.

La exalcaldesa aseguró que siente miedo por lo que le pueda pasar a ella y su familia, y por esa razón pidió celeridad en la investigación de las denuncias que ha instaurado “antes que sea demasiado tarde”.

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“Tuve el sueño de ser alcaldesa y se ha convertido en pesadilla. No me arrepiento de nada, pero siente uno ese sinsabor de las rencillas políticas. Los que han orquestado la persecución no dan la cara, ni ofrecen tregua. Con las intimidaciones me quieren desterrar de la patria chica; no es justo. Pido a Dios que me proteja y no voy a doblegar ante las intenciones de los violentos”, sostuvo.

Dijo que en este momento ningún familiar suyo tiene aspiraciones políticas y que tampoco está involucrada en el proceso de revocatoria que se adelanta contra el actual alcalde, Samir Casadiego.

“No le hemos hecho daño a nadie y el temor radica en las consecuencias, pues ya sufrimos la muerte de Álvaro Arévalo Ferrero por parte del Eln y solo queremos vivir en paz”, agregó, al tiempo que resaltó que no está pensando en abandonar su municipio.

Miriam del Socorro Prado Carrascal fue elegida como alcaldesa de Ocaña para el periodo 2016-2019, pero en su gobierno tuvo que hacerles frente a diferentes circunstancias que no le permitieron terminar.

En febrero de 2017, empezando apenas el segundo año de su gobierno, Prado fue detenida por la celebración indebida de tres contratos y la violación al régimen de inhabilidades e incompatibilidades.

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Tres meses después logró recuperar su libertad, pero tuvo que salir a afrontar un proceso revocatorio mediante el cual buscaban apartarla del cargo de manera anticipada. Este finalmente no logró los votos necesarios para que fuera avalado.

En mayo de 2019, la Procuraduría General de la Nación dejó en firme un fallo de segunda instancia que la destituyó e inhabilitó para ocupar cargos públicos por 10 años, porque suscribió de manera irregular el contrato No. 001 del 7 de enero de 2016, para la prestación del servicio de grúa en el municipio.

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