Un verdadero salvavidas les llegó a los cerca de 25.000 estudiantes de educación superior en Norte de Santander, de los estratos 1, 2 y 3, tras el anuncio del presidente Iván Duque y la ministra de Educación, María Victoria Angulo, de otorgar el beneficio de matrícula cero para el segundo semestre de 2021.

La decisión, que es considerada por los jóvenes como una victoria en medio del paro nacional que ya completa dos semanas, fue bien recibida por los universitarios de las instituciones públicas del departamento, aunque insistieron en que todavía hay algunas dudas que es necesario aclarar pronto. 

De acuerdo con el presidente Duque, esta medida se aplicará inicialmente para el segundo semestre de este año. Sin embargo, en el Gobierno trabajan para que se convierta en política de Estado a partir de 2022. Los recursos para financiar el programa educativo saldrán de una reasignación presupuestal acordada con el Ministerio de Hacienda.   

En los dos últimos semestres, por cuenta de la pandemia, cerca de 47.000 estudiantes, de todos los estratos, vinculados a las Universidad Francisco de Paula Santander (UFPS), de Pamplona y al Instituto Superior de Educación Rural (Iser) se habían beneficiado de la matrícula cero, gracias al apoyo de la Gobernación de Norte de Santander, como una forma de evitar la deserción ante la difícil situación originada por la COVID-19.

Aunque el programa tuvo buena acogida, el gobernador Silvano Serrano ya había anunciado que para el segundo semestre de este año no se podía garantizar nuevamente este auxilio en la matrícula, debido a la falta de recursos, por lo que el estudiantado se encontraba buscando alternativas para mantener el beneficio. 

“Afortunadamente tuvimos un buen ejercicio el año anterior y los ahorros nos permitieron tener esa posibilidad de contribuir nuevamente con cerca de $11.000 millones. Sin embargo, este no es un programa que pueda ser permanente, porque la administración departamental no tiene cómo mantenerlo”, había asegurado el mandatario en febrero pasado. 

Desde que comenzó la emergencia sanitaria, la matrícula cero ayudó para que los estudiantes que habían desertado pudieran retomar sus estudios. Según la Gobernación, solo en el caso de la Universidad Francisco de Paula Santander, la iniciativa permitió el retorno de más de 1.500 estudiantes, aproximadamente. 

Claridad sobre los recursos
Andrey Téllez Gómez es el presidente del Consejo Superior Estudiantil de la UFPS y al igual que muchos estudiantes celebró el anuncio del Gobierno, aunque pidió claridad sobre la forma cómo se obtendrán los recursos. 

“Hay una gran preocupación porque no sabemos exactamente cuánto dinero van a enviar, no sabemos si son los mismos $2.594 millones que dieron para este semestre o si esto se va a aumentar, porque la matrícula cero de todos los estudiantes vale $12.000 millones por semestre, para los 16.000 estudiantes de todos los estratos”, aseguró. 

El líder estudiantil consideró que se debe aclarar si los entes territoriales (alcaldías y gobernaciones) se tienen que vincular, y si se tendría que volver a la bolsa común en la que es necesario medir en qué capacidad se encuentran las universidades para asumir estos costos, pues en el caso de la UFPS fueron $3.000 millones aportados para el último semestre. 

Por su parte, Mauricio Castañeda, presidente del Centro de Liderazgo de la Universidad de Pamplona, resaltó el anuncio hecho por el Gobierno, “en un momento coyuntural que vive el país”, aunque pidió acelerar la llegada de los recursos a las universidades. 

“Hay que mirar las dos caras, y es si realmente llega el dinero a las universidades, porque en algunos casos el dinero les llega hasta finalizando el semestre y eso genera dificultades. Esperemos que el Ministerio, así como anuncia la matrícula cero, gire los dineros de una manera urgente y no esperen a que los estudiantes empiecen”, planteó. 

Según Castañeda, el 93,4% de los estudiantes de la Universidad de Pamplona se ubica en los estratos 1, 2, y 3, por lo que el anuncio “cae de una manera extraordinaria, debido a que vamos a estar tranquilos para el próximo semestre”. 
La ministra de Educación aseguró ayer a varios medios nacionales que la plata de la matrícula no saldrá de las universidades, pero no precisó más detalles de cuándo ni cómo se giraría. 

“Estamos mirando cómo se combina todo este esfuerzo que hicimos por apoyar a las universidades y así conectarnos con las familias, porque la matrícula la venían pagando las familias. Entonces, la misma plata que pagaban las familias ahora la asume el Gobierno. Con esto conectamos con la realidad de las familias y así se reduce la deserción escolar”, sostuvo la funcionaria.