Después de casi tres meses de cierre de la carretera La Soberanía en la vereda Troya, corregimiento de Samoré (Toledo), ayer fue habilitado el paso de vehículos de pasajeros y particulares.
A los automotores pesados o de carga les permitirán circular a partir del 1 de noviembre, siempre y cuando la variante esté terminada por el consorcio Vías Colombia 063 que tiene a cargo la recuperación del corredor La Lejía-Saravena.
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En el kilómetro 105, las lluvias de los primeros días de agosto ocasionaron la remoción en masa en ese punto que destrozó 1.200 metros de la vía, dejando incomunicado a los departamentos de Norte de Santander, Boyacá y Arauca.
El presidente de la Asociación Regional de Transportadores de Carga del Centro Oriente de Colombia (Atcrco), Rodolfo Delgado, informó que la decisión se tomó en conjunto con el consorcio vial.
“Le queremos informar a los transportadores de pasajeros que a partir de la fecha se pueden movilizar por la vía. Los de carga si vamos hasta el 1 de noviembre”, dijo Delgado.
La decisión de dejar circular el transporte de pasajeros también está relacionada con el flujo de personas que hacían trasbordo y pasaban por el derrumbe para llegar a sus destinos, lo que se había convertido en un peligro debido a las condiciones atmosféricas y del terreno.
También agregó que lo hicieron en solidaridad por el gremio y de las comunidades de Arauca y Norte de Santander para que empiecen a transitar en ambos sentidos.
“Queremos agradecerles a todos los transportadores por tenernos paciencia y colaborarnos al no venir acá a interrumpir las labores que está haciendo el consorcio”, mencionó.
La medida de dejar pasar únicamente a los buses intermunicipales de servicio de pasajeros causó controversia entre algunos conductores de vehículos de carga, quienes consideraron que era conveniente esperar hasta el 1 de noviembre cuando esté disponible la vía para todos.
A pesar de las lluvias en la zona, las labores de recuperación de la carretera continúan con la aplicación de triturado, piedras, tierra y acciones de afirmado para habilitar los 1.200 metros de la variante.
En crisis
En julio desde que se presentaron los primeros cierres de la carretera La Soberanía, con la caída de unos accesos del puente sobre el río Bojabá, empezaron los problemas para los transportadores del piedemonte llanero.
En esa oportunidad y cuando la temporada de lluvias ocasionaba daños a lo largo del corredor vial, hizo que se paralizara el transporte de ganado de ceba y carne en canal a Pamplona, Cúcuta y Bucaramanga.
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Por esa vía que proviene de los Llanos Orientales se movilizan a los Santanderes y el centro del país un aproximado semanal de 2.200 reses que surten las plantas de beneficio de Bucaramanga, Cúcuta y Bogotá.
“Estamos sacando buenos volúmenes de carne en canal, queso doble crema y otros productos”, aseguró en esa oportunidad la representante del Comité de Ganaderos de Arauca, Yennifer García.
Al igual se sintió el impacto en el transporte de pasajeros y de comestibles, entre ellos el cacao, yuca, plátano y demás productos de clima caliente.
También para el representante del Consejo Nacional de Arroz y de la Unidad de Productores Agropecuarios de Arauca, Alfonso Enrique Orozco, la situación se iba a volver crítica al no tener habilitado el corredor vial.
En esa zona de Arauca, advirtió que se cultivan 11.000 hectáreas que producen 52.000 toneladas de las cuales 34.000, las trillan en los molinos de Cúcuta y Bucaramanga.
Pero con la rehabilitación total de la carretera La Soberanía en los próximos días, el beneficio será para los transportadores y usuarios que tenían que tomar una ruta más larga para dinamizar el intercambio comercial con el oriente y centro del país.
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