Conservar los lazos de amistad entre Colombia y Venezuela se ha convertido en una bandera del rugby nortesantandereano con el apoyo de la agencia de Cooperación Alemana para el Desarrollo GIZ.
Tras cumplir el pasado mes de febrero la Copa Manuel Calderón Jiménez que fue ganada en su categoría élite por el equipo Alcatraz de Venezuela, entre hoy y mañana se disputará una nueva edición de la Copa Motilón Barí.
Este nuevo evento contará con la participación de un número cercano a los 600 deportistas quienes competirán en el estadio Centenario de la ciudadela de Juan Atalaya.
“Es un evento binacional en honor a nuestros indios Motilones. Contaremos con la presencia de las selecciones Colombia y Venezuela. En masculinos se jugará en la modalidad de 15 mientras que en femenino y juvenil en sevens (7)”, comentó William León, gerente deportivo de la Liga Nortesantandereana de Rugby.
En la modalidad de 15 competirán los equipos masculinos Cerberos, Alianza de Bucaramanga, Indios, Selección Venezuela, Selección Colombia, Táchira, Alcatraz, Águilas, Carboneros y Legendarios.
En femenino Táchira, Selección Venezuela, Legendarios, Carboneros, Santander y Selección Colombia.
En juvenil Táchira, Carboneros, Cobras y Cerberos.
“Básicamente tenemos la misión de generar acciones para la integración local, la sana convivencia y somos convencidos de que el deporte hace parte de ejercicio de integración. Viendo la importancia que realiza la Liga Nortesantandereana de Rugby y el acompañamiento de IMRD e Indenorte consideramos que estas acciones permiten generar cohesión entre Colombia y Venezuela a partir del deporte como estrategia clave para disminuir la xenofobia y el despertar de nuevas habilidades”, afirmó Diana Ramírez, asesora de convivencia pacífica y protección del programa Si Frontera, de la Cooperación Alemana para el Desarrollo GIZ, al ser consultada sobre la intensión de apoyar el evento.
Este certamen deportivo cuenta además con el apoyo del Instituto Municipal para la Recreación y el Deporte (IMRD), Indenorte y las Federaciones de Colombia y Venezuela.
Sobre el apoyo brindado por la GIZ, Ramírez dijo que se basó en el alojamiento para los equipos venezolanos, elementos deportivos que permiten el sostenimiento de los clubes y aportes en el ejercicio de premiación.
En la última competencia, Alcatraz de Venezuela fue protagonista al derrotar en la final a Cobras de Cúcuta. En el femenino, Carboneros Rugby Club derrotó a Legendarios mientras que en juvenil ganó Carboneros a Ceberos de Los Patios.
“El nivel deportivo de ambos países es parejo. En este evento invitacional vamos con la modalidad de 15 que permite ver un juego más estratégico, más dinámico. Veremos un buen espectáculo”, subrayó León, dirigente en la Liga en la última década.
Alain Altahona, primer nortesantanderano en jugar rugby profesional con la franquicia de Colombia -Cafeteros Pro- participará del certamen con su equipo Carboneros.
Asimismo, Yeiber Molina, miembro de la Selección Colombia juvenil, quien competirá en los Juegos Sudamericanos de Rugby en Argentina, jugará con Carboneros.
“Siempre he dicho que en estos eventos encontramos algo que nos une como hermanos con Venezuela. Es un espacio de integración”, resaltó León.
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