Igualmente, los moradores del casco urbano deben adoptar los mecanismos encaminados a prevenir agrietamientos de las viviendas y deslizamientos de tierra.
Juntamente con los presidentes de las Juntas de Acción Comunal (JAC) se activaron los planes de contingencia y los organismos de socorro se encuentran en máxima alerta para atender cualquier emergencia.
La situación más apremiante en la parte urbana se presenta en el asentamiento humano Brisas del Castillo donde un derrumbe afectó varias viviendas en la parte posterior ocasionando pérdidas materiales.
Ante el desplome de la paredilla, la señora Marianela Ortiz reportó afectaciones en los enseres de la cocina y electrodomésticos como nevera y estufa.
“A Dios gracias no había nadie en la casa porque estábamos en el trabajo, la tragedia hubiera sido mayor. Necesitamos la ayuda porque aún debemos créditos en los bancos”, detalló Ortiz.
El vecino Juan Carlos Pallares Madariaga, pudo apreciar la manera como el deslizamiento de tierra destruyó gran parte de los sueños de una humilde familia. “De lo alto se vino el barranco y queda uno impotente ante la fuerza de la naturaleza. Pedimos el apoyo para levantar las paredes afectadas”.
Jhonfaner Guerrero Rodríguez manifestó que varias viviendas del sector están en inminente peligro y es urgente la intervención de la administración municipal.