Al menos 16 personas, entre ellas 11 civiles, murieron el sábado en la ciudad siria de Afrin (norte) por disparos de artillería que cayeron particularmente sobre un hospital en manos de rebeldes proturcos, informó una organización no gubernamental.

Un médico, tres empleadas, otras tres mujeres y un niño figuran entre las víctimas del bombardeo del hospital Al Shifá, precisó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH). 

Los disparos, según esa oenegé, provenían de los territorios en manos de las fuerzas régimen o de fuerzas kurdas.

"Los disparos impactaron varios barrios de la ciudad y en el hospital", indicó a la AFP el director del Observatorio, Rami Abdel Rahmane.

"La mayoría de las víctimas murieron en los bombardeos del hospital", precisó la oenegé en un comunicado, en el que advertía que el saldo podría aumentar ante el elevado número de heridos.

La principal coalición dominada por los kurdos, las Fuerzas Democráticas Siria (FDS), desmintieron en un comunicado cualquier implicación en los hechos.

Situada en la provincia de Alepo, la región kurda de Afrin fue conquistada en marzo de 2018 por fuerzas turcas ayudadas por voluntarios sirios. Ambos desalojaron a la principal milicia kurda de la zona.

El sector, como todos los territorios en manos de rebeldes proturcos, también es objeto regularmente de asesinatos, atentados y explosiones.

Al menos doce personas, entre ellas combatientes, murieron el jueves en bombardeos del régimen sirio en la región de Idlib, el último gran bastión yihadista y rebelde de Siria.