“Pasó de ser comedia a una película de suspenso… suspendían a cada rato su estreno”. Es lo primero que dice el reconocido humorista colombiano Lokillo, quien esta semana estrenó en las salas de Cine Colombia su primera película: ‘Mi otra yo’, mientras que espera el lanzamiento de su nuevo show para Netflix. Es la historia de Jimmy Barón, quien tiene programa en televisión y alcanzó la cima del éxito con una fórmula fácil: hacer humor a partir del machismo y alentando la guerra de sexos para mostrar a la mujer siempre débil, inferior y perdedora. Todo esto, hasta que un hecho inesperado le pone la vida patas arriba, entre un problema judicial y un enemigo poderoso que lo obligan a convertirse en ‘Paola Linares’ y lo llevan a la cárcel de mujeres a vivir y a sufrir como una interna más. Una película realizada de la mano de Dago Producciones cuenta con un elenco encabezado por Jessica Cediel, Carla Giraldo, Shirly Gómez, Luz Estella Luengas, Conny Hernández, Ana María Sánchez, Jair Rodríguez, entre otros. El humorista habla sobre su primera experiencia en el campo del cine, el quehacer del un humorista en tiempos de pandemia y sus próximos proyectos. ¿Hace cuánto estaba dentro de sus planes llegar a ser cine? Llevo más de 15 años oficialmente haciendo comedia, en especial en radio, porque en televisión llevo muy poco. Siempre vi a mis colegas, mis compañeros, a mis referentes haciendo películas, y aunque tenía en los planes hacer una película o participar en una de ellas, no tenía mucho afán, en especial por el tipo de comedia que normalmente se hace en Colombia, que usualmente es muy agradable para la familia, pero yo soy más del humor negro. -¿Cómo fue el trabajo con Dago Producciones, de extensa trayectoria en el cine colombiano, en especial en la comedia? Dago García es un tipo brillante, sabe demasiado de cine y la gente no se imagina lo que es él para el cine colombiano. Vengo conociéndolo en los últimos años trabajando con él con mis temporadas de comedia en teatro en Bogotá, con algunos proyectos para el Canal Caracol y en esta oportunidad para mi debut en el cine. Le dije que tenía la historia, sabía quién quería que la escribiera, por lo que fui osado en ese sentido, pero Dago fue absolutamente generoso de seguirme con mis caprichos de cómo quería que fuera esta película. Incluso, desde la dirección, no quería que la realizara uno de los grandes directores, sino una persona que tuviera el hambre que yo tenía para aprovechar la primera oportunidad. ¿Cómo aparece ‘Jimmy Barón’, el protagonista de la película? Estos dos nombres unen a los dos presentadores de televisión de toda la vida, aunque el personaje no hace referencia a ninguno de ellos, se logró el nombre de un gran presentador. Es un comediante que es muy exitoso que es tan fracasado que lo único que tiene es fama y plata, logrando todo su éxito con chistes machistas, humillativo y prepotente que siente que está en la cúspide de la vida, hasta que la vida lo lleva a situaciones extremas de la vida, a través de las cuales, entiende el valor de la mujer, al ir a una cárcel de mujeres y tener que vestirse como una de ellas, que era lo que más detestaba en la vida. ¿Cómo fue actuar para cine? Es totalmente diferente a todo. La gente que hacemos televisión venimos de un ritmo completamente diferente, pero lo importante es respetar cada arte y escenario. El error más grande es sentir que por ser artista, da lo mismo que sea cine o televisión. ¿Cómo se preparó? Para hacer esta película busqué un coach, porque me parecía muy atrevido de mi parte no tener a un maestro de actuación todo el tiempo corrigiendo y dando herramientas. Conté con Jonathan Cabrera que es un actor de teatro muy duro, quien conoce muy bien el cine, por lo que me ayudó con los personajes, encontrarle el tono y deshacerme de muchos vicios y mañas que uno trae de interpretar otros personajes. CON PAOLA -¿El reto de interpretar a un hombre que termina encarnando a una mujer? Encontramos en camino. No era Lokillo haciendo de Jimmy Barón y a Lokillo haciendo de Paola. Es que Jimmy Barón debe interpretar a una mujer en una cárcel, lo que no era fácil poder esconder mis rasgos con una peluca y una pestañina, por lo que sabíamos que todo tenía que venir desde la parte actoral y corporal. Logramos con la voz, con la postura del cuerpo y la melena, llegar a la Paola que queríamos y diferenciarla de Jimmy Barón. ¿Había interpretado un personaje femenino, en la imitación o en sus personajes de humor? No había hecho personajes femeninos. Nunca tuve en mis proyectos tener un personaje de mujer o un gay en mis proyectos de comedia, porque siento que ya mucha mujer lo ha hecho y lo ha hecho muy bien, pero no me seducía el tema. Pero en la película era un real reto. ¿Aparecen sus reconocidos personajes en la película? Solo Rastacuando aparece en una escena. Se ha generado una gran expectativa, es un personaje muy querido, el más importante que interpreto, pero es una pequeña aparición, porque Rastacuando merece su propia película, porque tiene un mundo de cosas para crear y contar. ¿Difícil hacer humor en estos tiempos? Particularmente por estos días, en el último mes, el país está en una situación de mucho estrés, por lo que es más difícil hacer humor, porque si decides utilizar tu humor como herramienta de opinión sobre lo que está pasando, generará controversia al estar totalmente polarizados. En mi caso, he podido decir lo que siento, pero cada vez es más complejo hacer humor, porque cada vez existen más gremios defensores, por lo que cualquier palabra puede ser malinterpretada y ofender a ciertas personas. -¿Qué viene para Lokillo en esta segunda parte del año? Irónicamente este año ha sido el mejor de mi carrera, con dos de los más grandes logros, como es el estrenar mi primera película y mi primer especial para Netflix, que está increíble, me encantó cómo quedó. A ese especial solo le faltó un buen humorista (risas). También logramos lanzar el álbum con las canciones de Rastacuando que está en todas las plataformas. Espero, a finales del año, poder hacer una gira de presentaciones por Estados Unidos. |