Una seguidilla de hechos violentos demostró que las amenazas y las insistencias de una banda delincuencial que delinque en el centro de Cúcuta no tienen límites al momento de extorsionar a sus víctimas.

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La mañana de ayer, los empleados de un taller de repuestos para taxis se percataron que la noche del jueves, un hombre lanzó una granada en el lugar, pero que por fortuna no explotó.

La rutinaria revisión de las cámaras de seguridad del establecimiento les permitió a los empleados y propietarios darse cuenta de los movimientos que se dieron desde el exterior del negocio y del lanzamiento del explosivo.

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“Primero estuvieron tres hombres y después se ve a un sospechoso que pasó corriendo por el frente, pero están analizando detalladamente los videos de varias cámaras para verificar bien quién fue”, explicó un allegado a las víctimas.

Cuando se descubrió la amenaza y fueron alertadas las autoridades, la Policía arribó al sitio, en la avenida 10 entre calles 1 y 2, de Carora, y evacuó a las 16 familias que viven en este sector, mientras los técnicos antiexplosivos adelantaban las pesquisas para destruir de manera controlada la granada.

Según se conoció, hace al menos una semana, una pareja que se movilizaba en una motocicleta se paró frente a la misma vivienda e hizo varios disparos, como una intimidación más la víctima.

Además, los atacantes también le enviaron a la víctima una foto de una granada frente a ese establecimiento donde funciona el taller, por lo que el ataque estaba latente.

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El propietario del lugar hace parte de una asociación de taxistas y su negocio ronda en medio de estos vehículos de servicio público.

Una extorsión
 

De manera extraoficial se conoció que, al parecer, el dueño del negocio ha sido víctima de extorsiones y amenazas por parte de una banda delincuencial.

Una fuente judicial aseguró que se avanzan las pesquisas para identificar a los autores del hecho, de los que se presume que pertenecen a una estructura dedicada al microtráfico que quiere imponer terror en este sector de la ciudad.

Por ahora, los investigadores judiciales adelantan las indagaciones para ir tras la pista de los responsables de atentado, judicializarlos y capturarlos.

Precisamente por esto y por la complejidad y el riesgo que se generó por el artefacto explosivo, la inspección se prolongó durante al menos dos horas, hasta que los técnicos antiexplosivos destruyeron la granada de manera controlada.

El ataque a un bar

A mediados de octubre, en un bar ubicado en la avenida 7 con calle 5, del barrio El Callejón, un hombre que, al parecer, pertenece a la banda ‘Los AK47’, liderada por Jhoswar Saúl Hernández Sanabria, mejor conocido como 'La S' o 'Saúl', lanzó una granada en el lugar, dejando a tres personas lesionadas con esquirlas y aturdimiento.

Según se conoció, un hombre que pasó caminando por la avenida 7 y que venía desde la calle 4, al aproximarse a la esquina de la calle 5, soltó el anillo de seguridad de la granada, se acercó a la entrada del establecimiento y luego de empujar a un hombre que estaba alrededor, lanzó el explosivo, dejando pánico entre los asistentes.

Dos hombres y una mujer, de 26 años, que trabajan en el lugar, resultaron afectados con esquirlas en la cara y las piernas, además del aturdimiento por la explosión. Sin embargo, no tuvieron gravedad, a pesar de haber sido trasladados a un centro médico.

El desconocido una vez cometió el hecho, se devolvió corriendo y se le perdió el rastro entre la oscuridad y la soledad del sector.

En ese momento se conoció que el responsable del hecho sería 'Saúl', al parecer, por un tema de extorsiones.

Este hombre que tendría a su mando un grupo de al menos veinte delincuentes, quiere mantener el dominio total de la zona céntrica de Cúcuta y sus alrededores, para mantener su imperio del terror, financiado por el microtráfico, extorsiones y la explotación sexual en toda la zona céntrica de Cúcuta. 

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