El jueves en la noche, la incertidumbre y el cansancio que tenían los conductores y habitantes que a diario transitan por ese tramo de la vía donde abandonaron un supuesto carro bomba, que atravesaron en la mitad de la carretera, justo en el sector Río Nuevo, de Tibú, los hizo actuar.

Si quieres tener acceso ilimitado a toda la información de La Opinión, apóyanos haciendo clic aquí: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Entre varias personas decidieron prenderle fuego al carro Renault 12, de color amarillo, para saber de una vez por todas, si tenía o no explosivos.

La valerosa acción, que fue planeada con precaución, no dejó afectaciones en ninguna persona, y, además, dio un parte de tranquilidad a todos los tibuyanos que a diario se movilizan por esa vía, pues el vehículo era un señuelo, y no tenía ninguna carga explosiva.

Sin embargo, ese carro con grafitis de la disidencia del Frente 33 de las Farc, no era lo único que atemorizaba a la comunidad, también les preocupaba un cilindro de gas que apareció dos días después al lado del automotor, bloqueando así totalmente la vía.

“Daba miedo aproximarse y mover ese cilindro más cerca al vehículo para que las llamas lo consumieran, pero varios choferes, le amarraron con cuidado una cuerda de más o menos 70 metros y la halaron para acercarla al carro. Al no explotar con el movimiento brusco, se acercaron al vehículo y lo prendieron fuego”, explicó un habitante del sector.

Conozca: ‘Jhon Mechas’ mantiene bajo el terror a Tibú

Y aunque el carro ya no es un riesgo para la población, todavía se encuentra en la vía lo que ha afectado levemente el tráfico, la comunidad espera que en estos días lo puedan remolcar.

También se conoció que el Ejército había activado los protocolos de seguridad para llevar hasta donde estaba el automotor, pues sabían que era un señuelo para que unos francotiradores atacaran a los militares que se acercaran.

Esperan una baja en los precios

Estos últimos eventos violentos que la disidencia de las Farc ha ocasionado en la vía principal a Tibú, aparte de atemorizar a sus ciudadanos, también ha afectado en gran medida sus bolsillos, resaltó el habitante de esta zona, porque las largas esperas de los vehículos que transportaban alimentos perecederos, con los trancones, bajo el calor o la humedad, ha hecho que un porcentaje considerable de la mercancía se dañe al llegar a su lugar de destino.

Así, los tenderos y distribuidores de alimentos han tenido que subir los precios de tal forma que no tengan pérdidas, pero a muchas familias de esta región del Catatumbo, que viven del pago diario, se han visto obligadas a comer solo dos veces al día por el sobrecosto.

“Por ejemplo, un tendero me dijo que pagó en promedio 70.000 mil pesos por una caja de tomates, en estos días y cuando llegó el encargo, al limpiar los tomates, solo la mitad estaban buenos para vender, por lo que le subió el precio de tal forma que no pierda, y así están todos”, señaló un tibuyano.

Además lea: Accidente de tránsito deja un motorizado muerto en el Anillo Vial Occidental

Ya estaban llegando

El Ejército y la Policía de Norte de Santander, quienes aseguran que están trabajando en sincronía para neutralizar los diferentes atentados terroristas de los grupos criminales que delinquen en ese territorio, señalaron que se encontraban ejecutando un operativo para neutralizar el vehículo, pero antes de llegar lo consumieron las llamas.

“La Fuerza Pública presente en el sector ya se encontraba en un dispositivo de seguridad perimétrico y realizando las inspecciones para determinar si tenía o no explosivos, los cuales quedaron descartados”, señaló el Ejército.

De igual forma, resaltaron que debido al terreno, existía una alerta de francotiradores de esos grupos delincuenciales, sin embargo, luego de la incineración, las sospechas también quedaron descartadas.

Le puede interesar: Lo asesinaron y le dejaron un letrero

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion