Desconcertados, abrumados y tristes se encontraban ayer los familiares de Angie Milen Sarmiento Ortiz por su sorpresiva muerte. La mujer era una docente universitaria, de 40 años, que falleció en horas de la mañana mientras se recuperaba de una liposucción practicada tres semanas atrás.

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Aunque era profesional en terapia ocupacional y enseñaba en una universidad de Cali, donde vivía con su pareja y un hijo, decidió volver a Cúcuta para estar en la casa de sus padres visitarlos, operarse y esperar el periodo de recuperación. La intervinieron el 5 de julio.

 “Ella estudió y vivió durante muchos años como docente y experta en la rama de la salud, por eso cuando estuvo en recuperación tomamos todas las recomendaciones posibles y la verdad nunca vinos que tuviera una complicación mayor. Lo único que me decía era que le daban mareos cuando se cambiaba una faja que debía tener, pero eso era todo”, dijo una familiar.

Y es que su recuperación era, aparentemente, tan buena que el especialista que la operó, en el último control dijo que le daría de alta hoy, para que planeara su viaje de retorno a Cali, sin embargo sucedió todo lo contrario.

El trágico día

Su madre quien se quedaba en el mismo cuarto que la docente, aseguró que su hija estuvo toda la noche durmiendo y se despertó ayer como de costumbre.

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“Eran como las seis de la mañana, ella fue al baño y yo salí a tomarme un café al porche de mi casa con mi marido y un vecino. A los minutos mi esposo entró a la cocina para dejar los pocillos, la vio acostaba boca arriba en el piso intentando respirar y de una vez nos preocupamos”, relató la madre.

De inmediato sacaron su vehículo y con la ayuda de unos vecinos la subieron  al carro para ir a un centro asistencial. La madre aseguró que en todo momento estaba consciente y le hablaba.

“Lo que más me decía era que le tuviera la argolla de compromiso porque como iba a entrar a una clínica podía perderse, ya cuando llegamos, casi ni podemos sacarla porque tanto su papá como yo, pues no tenemos mucha fuerza y no tuvimos mucha ayuda de la gente, pero finalmente entró a la clínica”, aseguró.

Pero a pesar de los esfuerzos que hicieron los enfermos y médicos para estabilizarla, a los pocos minutos de ingresarla al centro asistencial falleció.

Sarmiento Ortiz llevaba poco tiempo trabajando en la universidad en Cali y estuvo durante años laborando en centros de salud del departamento así como siendo docente de la Universidad de Pamplona.

Esta universidad y el Hospital San Juan de Dios de Pamplona, en donde trabajó, publicaron en redes sociales su sentido pésame a sus familiares.

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