Una denuncia instaurada en junio de 2017, por un atraco en un local comercial, le permitió a las autoridades descubrir y desmantelar a una banda de presuntos atracadores, extorsionistas y desguazadores de carros, entre los que habían miembros de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).

La Fiscalía inició las investigaciones en asocio con uniformados de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Mecuc, en la que conocieron que la motocicleta utilizada para cometer el robo, pertenecía a un policía de la Sijín.

De inmediato, la Fiscalía solicitó interceptaciones de líneas para seguirle el rastro a los sospechosos para conocer cómo delinquían.

Las autoridades descubrieron que los patrulleros Bernardo Lorza Peñaranda, adscrito a la Sijín de la Mecuc, y John Carlos Leal García, perteneciente a la vigilancia de la ciudadela La Libertad y El Escobal, presuntamente eran integrantes de esa red delincuencial.

Además que, Yohan Fernando Barragán Wichada, Jhoiner Ortiz Castaño y Alfonso Romero Prada también harían parte de la banda.

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Los Delitos

Lo que estos hombres hacían, según se pudo conocer en las audiencias concentradas, es que primero identificaban a las posibles víctimas para robarlas o extorsionarlas.

Los policías supuestamente llegaban a donde sus víctimas y les aseguraban que había un procedimiento en contra de ellas y que para evitarlo, debían pagar una fuerte suma de dinero. “Muchas de las personas, asustadas, accedían y entregaban la plata”.

Los investigadores descubrieron que la banda también se dedicó a desguazar los vehículos que eran inmovilizados en diferentes operativos policiales y permanecían en las instalaciones de la Sijín.

Lorza y Leal se las habían ingeniado para burlar los controles al ingresar a las instalaciones de la Sijín y así lograron desguazar por lo menos 18 vehículos de alta gama, ganándose alrededor de 250 millones de pesos en menos de un año, con la venta de las autopartes.

Lorza, quien estuvo laborando en la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y en la guardia de la Sijín, era el cerebro del robo de las autopartes.