Eran la 1:32 minutos de la madrugada, del lunes 9 de noviembre, a la salida de Ocaña hacia Los Almendros, sonaron dos balazos que un motorizado hizo sin bajarse de una moto.
El ataque iba dirigido contra la vivienda del coordinador del Centro Educativo Alfonso López, de Ocaña, dejando daños materiales, pero el mensaje era amedrantar y ejercer presión para lograr un millonario pago a cambio de no atentar contra la vida del docente ni de su familia.
“Esta no era la primera vez que intimidaban al profesor. Ya lo habían amenazado con atentar contra él o su familia, sino pagaba $120 millones. Pero gracias a la oportuna denuncia, logramos capturar a los delincuentes”, dijo una fuente judicial.
La investigación
Cuando el Grupo de Acción Unificada por la Libertad Personal (Gaula) de Norte de Santander conoció el caso, iniciaron las labores de inteligencia, recolectando testimonios y tras un seguimiento por cámaras de seguridad, identificaron, en tiempo record, a los presuntos extorsionistas que se hacía pasar como integrantes del Epl para amedrantar a sus víctimas.
Cuando los uniformados del Guala tenían todo el material probatorio contra los autores de este hecho, bajo la supervisión de la Fiscalía 4 Especializada, decidieron solicitar las órdenes de captura, las cuales fueron avaladas por un juez.
Ante eso, la noche del martes allanaron una vivienda en el barrio Villa Rosa, de Ocaña, y capturaron a Leonardo Becerra Carvajalino y Marlon Bayona Ibáñez.
Los delitos
Becerra Carvajalino, de 26 años, oriundo de Teorama, fue señalado por ser quien presuntamente disparó contra la vivienda del docente, además tiene antecedentes por constreñimiento ilegal, daño en bien ajeno, hurto calificado y hurto simple.
A Bayona Ibáñez, de 34 años y ocañero, lo capturaron en compañía de Becerra, este hombre es presuntamente el cómplice de la extorsión que le cometían al docente. Actualmente Bayona era uno de los conductores de la empresa en donde era socio la víctima, estando enterado de sus movimientos financieros. Entre los antecedentes que le figuran está fabricación, tráfico y porte de armas de fuego.
“La investigación continua porque hay una persona cercana a la familia que habría facilitado información a los delincuentes para amedrantar al docente, quien fue desplazado de su vivienda”, dijo la fuente judicial.
En medio del allanamiento el Gaula incautó un revolver, un arma traumática, seis teléfonos celulares y varios cartuchos calibre 38.
