Como una ‘película de acción’ describen algunas personas que viven o trabajan cerca de la Autopista de Atalaya, a la altura del puente peatonal del barrio Antonia Santos, los momentos en que unos desconocidos le dispararon a un carro Chevrolet Spark GT, negro, de placa DMM348.
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El conductor, quien trabaja en una aplicación de transporte, recogió a las 6:00 p. m., en la calle 25 con avenida 5, de Buenos Aires, a un pasajero, quien presuntamente transportaba $40 millones, producto de la venta de un carro.
Pero lo que parecía ser una carrera normal que tenía como destino el barrio Los Olivos, se convirtió en momentos de pánico para el conductor y el mismo pasajero, pues al notar que cuatro hombres, que se movilizaban en tres motos Suzuki GN, los estaban siguiendo.
El chofer aceleró su marcha para dejar atrás a los motociclistas, pero los desconocidos los alcanzaron cuando se movilizaban por la Autopista de Atalaya, cerca de la entrada de la parte baja del barrio Tucunaré.
Los delincuentes, al ver que no alcanzaban el vehículo negro, optaron por sacar un arma y comenzar a disparar en varias oportunidades, impactando el vidrio trasero y las latas.
Pero las balas alcanzaron a herir al conductor, de 31 años, quien recibió un disparo en el hombro, mientras que el otro hombre, de 42, resultó herido en el antebrazo izquierdo, la pierna izquierda y el antebrazo derecho.
A pesar del ataque, las víctimas siguieron adelante, mientras que los delincuentes huyeron sin llevarse el dinero.
“Eso fue muy duro porque los ‘manes’ iban a toda velocidad detrás del carro, pero cuando pasaban cerca de un supermercado y un taller de mecánica, sonaron los disparos, todos nos asomamos a ver qué pasaba, pero los que estaban cerca del supermercado se escondieron en ese negocio”, indicó un testigo.
Llegaron a un centro asistencial
El conductor del Spark condujo hasta el Policlínico de Atalaya, donde sorprendió a las personas que estaban en ese centro asistencial al llegar con el carro baleado y unos golpes en la parte de adelante.
Además, cuando se bajó ensangrentado, fue atendido de inmediato, mientras que el pasajero fue trasladado hasta el Hospital Universitario Erasmo Meoz.
“Cuando los bandidos se fueron, el conductor cogió por el barrio Antonia Santos para salir al Policlínico, ahí lo atendieron”, sostuvo otro testigo del hecho.
Las autoridades llegaron hasta el lugar de los hechos y recolectaron los vídeos de las cámaras de seguridad, que serán claves para identificar a los responsables.
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