La tristeza y la resignación que sintió el intendente Jorge Eduardo Díaz, líder de los guías caninos de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), cuando se enteró que ‘Jelly’, una perra antiexplosivos con más experiencia en esta unidad policial, murió por cuenta de una caja bomba que el Eln instaló en el puente García Herreros, hizo contraste con la alegría y satisfacción que lo invadieron cuando supo que sus compañeros capturaron al presunto responsable de este hecho.
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Dos días fueron suficientes para que los investigadores de la Sijín adelantaran un riguroso seguimiento y llegaran hasta una vivienda en el barrio Antonia Santos, donde estaba Eduardo Ríos Rodríguez, conocido como ‘El Chulo’, señalado de ser colaborador y miembro del frente urbano Carlos Germán Velasco Villamizar, del Eln.
Las autoridades adelantaron un riguroso seguimiento desde la 2:00 de la madrugada del miércoles 23 de febrero, cuando ‘Jelly’ murió al acercarse a la caja que había instalado este grupo armado ilegal con explosivos, en el Anillo Vial Oriental, muy cerca de un reconocido centro comercial, para tener pistas de los responsables de este hecho.
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“Tuvimos información muy importante por fuentes humanas de que este hombre delinquía para el Eln y por eso hicimos todo el seguimiento necesario para llegar a él”, explicó una fuente judicial.
Sin embargo, también se conoció que algunos rastros que quedaron en la escena del hecho fueron fundamentales para que los investigadores que le seguían la pista a este presunto integrante de la célula urbana de la guerrilla, pudieran tener su identificación a través de sistemas tecnológicos monitoreados.
Cruce de disparos
El viernes, cuando un grupo de policías arribó al barrio Antonia Santos, para capturar a ‘El Chulo’, se produjo un intercambio de disparos entre los uniformados y este presunto delincuente, que intentó evadir el cerco de las autoridades.
Sin embargo, en la oportuna reacción, los policías redujeron al sospechoso y lo detuvieron con un arma, prendas militares, munición y material de logística alusiva al frente urbano Carlos Germán Velasco, del Eln.
El general Óscar Moreno, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta, aseguró que a través de medios técnicos y del aporte de la comunidad, lograron llegar hasta la ubicación de este hombre.
El oficial resaltó la importancia de la captura, por el impacto que generó en la comunidad la pérdida de la canina antiexplosivos.
“Esta captura se da a través del análisis técnico, de las fuentes humanas y de la labor de vecindario que en esos momentos se pudo recoger en el lugar de los hechos”, dijo el oficial.
El servicio de ‘Jelly’
La canina antiexplosivos, de raza Belga Malinois, que murió cuando se acercó a verificar la caja bomba en el puente García Herreros, llevaba siete años de servicio en la institución y estaba a punto de jubilarse.
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‘Jelly’ se destacó por su experiencia y por eso siempre estaba alerta ante cualquier amenaza, pues sus guías sabían que era su mejor elemento para descartar o verificar una carga explosiva.
“Era excelente con cualquier guía que le correspondiera. Una verdadera heroína, para nosotros todo canino que esté en la fuerza es un ángel, porque arriesgan su vida para salvar a uniformados. Ella era muy experimentada y por eso estaba en las alertas más complejas. Es un golpe muy fuerte, nos ha pegado duro, pero sabemos que así es el trabajo y hay que continuar trabajando con más fuerza”, aseguró el líder de los guías caninos en ese momento.
