La derrota del Bayern Múnich, el miércoles en Francia, a manos del París Saint-Germain, aceleró el detonante de una crisis dentro del conjunto bávaro que amenazaba con estallar en cualquier momento.
El gigante alemán, ganador de cinco coronas europeas, tuvo una actuación irreconocible en el Parque de los Príncipes, que terminó horas más tarde con el despido del técnico italiano Carlo Ancelotti, a quien le quedaba un año de contrato.
Sin embargo, la dolorosa caída por 3-0 ante el PSG fue solo la gota que rebosó la copa. El arranque del Bayern Múnich en la actual temporada no ha sido malo (cuatro victorias, un empate y una derrota), está tercero a tres puntos del líder Borussia Dortmund, pero no fue el comienzo arrasador al que están acostumbrados sus hinchas, y las dudas sobre el sistema de juego de Ancelotti, pero sobre todo de sus rotaciones, empezaron a crear mal ambiente dentro del equipo.
La salida del técnico italiano seguramente traerá cambios, y es imposible no pensar en que uno de los damnificados con el despido de Ancelotti será el cucuteño James Rodríguez, quien llegó al club esta temporada a pedido del entrenador.
James, sin su ángel protector
Al lado de Ancelotti James ha mostrado su mejor versión en Europa. La temporada 2014-2015 en Real Madrid fue la mejor del colombiano en su paso por la ‘casa blanca’, siempre con la confianza del entrenador italiano, que le daba la libertad de moverse por el sector de la cancha que el zurdo quisiera, y lo eximía por momentos de labores defensivas. Luego, al Real Madrid llegaron Rafa Benítez y Zinedine Zidane, y el ‘10’ de la selección Colombia fue prácticamente borrado.
Ahora, una de las principales dificultades que tendrá James será terminar de adaptarse a la Bundesliga, pues de momento van seis fechas del campeonato alemán, y el colombiano estaba empezando a entrar, de a poco, en el sistema de juego del Bayern gracias a las rotaciones de Ancelotti.
Haberle mermado los minutos en cancha a los veteranos Arjen Robben (33 años) y Franck Ribery (34 años) fue uno de los ‘pecados capitales’ que cometió Ancelotti. Así las cosas, el nuevo entrenador muy seguramente tratará de enderezar el rumbo devolviéndoles la titularidad a los históricos ‘intocables’, y el colombiano tendrá que soportar de nuevo el malestar de comenzar en el banco de suplentes.
El sistema táctico también puede convertirse en un obstáculo serio para James, pues los equipos poderosos de Europa generalmente juegan con un delantero centro y dos atacantes por las bandas, y el colombiano ha demostrado, tanto a nivel de clubes como en selección, que su mejor performance sale cuando tiene la libertad de jugar por el centro del campo, sin estar atado a la banda.