La Opinión
Suscríbete
Elecciones 2023 Elecciones 2023 mobile
Cúcuta Deportivo
El Cúcuta Deportivo al final se resignó y quedó eliminado del Torneo de la B
El Cúcuta Deportivo ganó su partido, pero se quedó por fuera de los cuadrangulares finales.
Image
Omar Romero - Periodista de Deportes
Omar Romero Güiza
Sábado, 8 de Octubre de 2022

El Cúcuta Deportivo cumplió este sábado con la tarea de ganar en la última jornada del Torneo Finalización de la primera B del fútbol colombiano, pero el resultado no le alcanzó y se quedó por fuera de los cuadrangulares finales.

El ‘Doblemente Glorioso’ 2-1 Tigres FC, que vino con un equipo alterno, porque hace varias fechas había asegurado su cupo entre los ocho.

Jhon Bayron Suaza (9’) y el argentino Lucas Ríos (35’), alimentaron el sueño de la clasificación. Por  Tigres, descontó al minuto 39 el brasileño Marcos Vinicius.

“Queda uno con el sabor amargo de que se pudo dar más”, expresó el mediocampista William Parra, tras el encuentro.


Lea aquí: Cúcuta Deportivo se juega su última carta ante Tigres: ¿le alcanzará para clasificar?


Cúcuta salió con la mejor disposición de hacer su trabajo, que era ganar y despedirse con decoro de su afición.

Comienzo flojo

En los primeros minutos, Cúcuta y Tigres comenzaron demasiado cautelosos para proponer buen fútbol dónde el más necesitado era el equipo motilón.

Los rojinegros, cómo fue su habitual estilo, buscó abrir el juego por el sector derecho, con Santiago Guzmán y Jeyssen Núñez.

La tribu rojinegra entró concentrada y con la convicción de asegurar los tres untos, más allá de lo que pasará en los otros estadios.

Luego de un tiro de esquina, ejecutado por Núñez, apareció libre de marca el zaguero antioqueño John Byron Suaza y de golpe de cabeza puso a ganar de manera parcial a su equipo y la afición se ilusionaba con la clasificación.

A partir de ese momento, el partido cambió para el ‘Doblemente Glorioso’, que se apoderó de la pelota y las acciones, pero no fue profundo en ataque.

Lucas Ríos intentó hacer sociedad con César Carrillo y William Parra, pero por momentos no se entendieron.

A pesar del control de la pelota que tenía el once rojinegro, este no hacía daño y Tigres tampoco se afanó, pues ya estaba clasificado.

El partido entró en una monotonía, las escasas emociones y el poco fútbol fue desapareciendo al transcurrir de la primera media hora de juego. Eso permitió que Tigres saliera más al ataque.

Pero la ‘Tribu’ rojinegra despertó de su letargo y al minuto 34, Ríos aprovechó un pase y dentro del área de puntazo, marcó el 2-0, las matemáticas se le daban al equipo para ganar con más de dos goles.

La alegría no duro mucho y cinco minutos más tarde, los volantes y defensas del Cúcuta se quedaron pasivos y Marcos Vinicius descontó para el 2-1, parcial.

El cucuteño Jhon Byron Suasa abrió el camino del triunfo y de la ilusión de la clasificación.

Todo consumado

Para el segundo tiempo, el Cúcuta de nuevo se fue a la carga, aunque la clasificación ya era historia.

Como lo dijo un jugador en la antesala al partido, había que terminar con decoro y regalarle a la afición un triunfo en agradecimiento por haberlos acompañado durante el semestre.

Pese a todo, los hinchas no dejaron de alentar a su equipo, hacían fuerza para que ese balón  traspasara la raya de gol, pero el exceso en el manejo de la esférica y el individualismo fueron la falla en los jugadores motilones.

Lea aquí: Oro para Jossimar Calvo en los Juegos Suramericanos

El partido en la segunda mitad se jugó en campo de Tigres, pero no se fue contundente. Sin embargo, en el entretiempo técnico y jugadores sabían que por más goles que hicieran, las cuentas no les iba alcanzar y la parte final fue de trámite y cumplir con el calendario.

Con un sabor agridulce, la afición despidió a su equipo a la espera de lo que irá a pasar con el proyecto 2023.

Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en:   http://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion

Temas del Día