Argentina, con Messi apenas 20 minutos en cancha, dio un paso gigante este viernes para acompañar a Brasil al Mundial de Catar-2022 al derrotar 1-0 a su histórico rival Uruguay en el clásico del Río de la Plata.
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El delantero Ángel Di María, al minuto 7, anotó con categoría el gol solitario de Argentina, que se llevó un premio excesivo del estadio Campeón del Siglo de Montevideo, extendiendo su invicto a 26 partidos (17 victorias y 9 empates).
El selecciondor de Uruguay, Óscar Tabárez, destacó que su equipo "no se cayó" tras el, pero lamentó que "cada vez queda menos" en el camino a Catar-2022.
"El equipo no se cayó (...). Se siguió buscando hasta el final, hubo un buen rendimiento colectivo, actuaciones individuales destacadas de algunos futbolistas", resaltó el 'Maestro' sobre la actuación celeste en el estadio Campeón del Siglo.
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"Quizá estamos en un momento en que estamos pagando caros los errores", lamentó.
No obstante, opinó que "no hay que darle espacio a los pensamientos negativos" y aseguró que el rendimiento de su selección demuestra que hay cómo "arreglarlo para los partidos que vienen".
"La circunstancia dramática es que cada vez queda menos" en las eliminatorias suramericanas "y no llegan los resultados todavía".
Tabárez, cuyo cargo estuvo en entredicho tras las duras derrotas y la pálida imagen que dejó la Celeste en la triple fecha pasada, sostuvo que tanto él como los jugadores querían "la revancha".
Se viene otro clásico
La albiceleste con(28 puntos, está muy cerca de convertirse en la segunda selección suramericana con boleto a Catar tras Brasil, que selló pasaporte el jueves ante Colombia con un 1-0 en Sao Paulo, confirmando su asistencia perfecta a los mundiales.
El martes, los archirrivales volverán a medirse en San Juan (oeste de Argentina): Brasil con la tranquilidad de la tarea hecha y Argentina con el sabor dulce de una cercana clasificación. Ambas potencias regionales tienen un partido pendiente de la sexta fecha.
Incluso la Seleçao transformará ahora la clasificatoria en un banco de pruebas para lanzarse a la sexta corona mundial.
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Pero la tarea es muy dura: Brasil fue el último campeón mundial por Suramérica en 2002 y desde entonces solo Argentina llegó a una final en 2014, en medio de una marcada supremacía europea.
Ecuador se consolida en el último escalón del podio con pase directo al Mundial al derrotar sin sobrarle nada a la colista Venezuela (1-0), que está a punto de confirmarse como el único seleccionado sudamericano que nunca asistió a un Mundial.
El equipo de la mitad del mundo quiere asegurar su clasificación echando mano al clásico libreto defensivo de su entrenador, el argentino Gustavo Alfaro, aunque sufrió en exceso ante una vinotinto ya en 'modo despedida'.
Pero el martes, en el cierre de la ventana de noviembre, Ecuador tendrá un duelo vital. Se verá las caras en Santiago con una ascendente selección chilena que acumula tres victorias consecutivas en el premundial y con 16 puntos (4 puesto) lidera un pelotón de combinados que pelean por uno de los boletos directos o al repechaje en caso de clasificar quinto.
Tras su derrota con Brasil, Colombia quedó en zona repechaje con 16 puntos, al igual que Uruguay (peor saldo de goles) relegado a la sexta posición y con un difícil compromiso el martes ante Bolivia en la altura de La Paz (3.600 metros).
La celeste mereció más en su casa por su espíritu de lucha y vigor pero es notoria la falta de generación de fútbol.
Perú, otro en problemas, mejoró el jueves (3-0) ante una Bolivia cerca del abismo pero el equipo de Ricardo Gareca sigue en terapia intensiva aunque con mejor pronóstico ya que el martes visita a la casi eliminada Venezuela.
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