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Yimmy Durán heredó la vena musical de su padre
Le compuso una canción a su padre, quien falleció hace tres años, a ritmo de vallenato romántico. El cucuteño es microempresario y cantante.
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Martes, 13 de Abril de 2021

Los primeros arrullos que escuchó Yimmy José  Durán Peinado en su cuna fueron notas salidas del acordeón. Ese ambiente se vivía en su casa porque su padre Reinel Durán fue un reconocido acordeonero del municipio de Convención.

Y entre notas de acordeón, caja y guacharaca, fue educando su oído y su voz y se encaminó desde bien temprano por el vallenato.

No tuvo escuela de formación. Solo contó con  la asesoría de su padre y las ganas por ser escuchado en las emisoras y festivales de la región. Aprendió a tocar caja y la guacharaca y en muchas oportunidades acompañó a su papá en los compromisos.

Se le facilitó componer y junto al acordeonero Neder ‘El Gringo’, Ramos se lanza al ruedo, en 2018,  con dos inspiraciones: ‘Papelitos de amor’ y ‘A mi querido papá’, con la  producción del entonces bajista del Binomio de Oro,  Jose ‘el Quevas’ Vásquez.  La grabación se produjo en Barranquilla en los estudios de  Producciones Récords.

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Su padre falleció hace tres años y en la canción describe a ese hombre que le dio la vida y que lo contagió con el ‘virus’ del vallenato. “Es un homenaje por su entrega al acordeón y a la música vallenata”.

Y ‘Papelitos de amor’ se inspiró en la que hoy es su esposa Andreina Otálora cuando empezaron el  noviazgo.

También grabó  ‘Un respiro a mi vida’ de su autoría, con el mismo acordeonero de Los Chiche Vallenatos.

El video, donde participa el actor vallenato Heráldico ‘Aco’ Pérez, quien hizo el papel de ‘Pluma blanca’ en la novela de Diomedes Díaz y de Alexis, en la serie La Playita, vino expresamente a Cúcuta para grabar unos pasajes en la calle 11,  en la calle sexta, a la altura del centro comercial Alejandría, y en una cabaña en Chinácota, donde recrea escenas en la piscina, acompañado también de jóvenes.

El repertorio lo ha ido agrandando, pero aún no lo ha subido a las plataformas musicales.

Yimmy Durán no se ha encasillado en  ningún estilo y dice que canta vallenato clásico, de la nueva ola y de todos los juglares. Vivió mucho tiempo de la música. Andaba de feria en feria y traspasó la frontera  con Venezuela con mucho optimismo, persiguiendo su sueño. Y lo logró.

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Sin embargo, hizo un pare con la llegada del confinamiento por el coronavirus  y se dedicó al comercio. Primero abrió un supermercado en el barrio Motilones y después pasó a fabricar calzado de damas y terminó fabricando esponjas para lavar platos.

Ahora que todo está volviendo a la ‘nueva normalidad’ retomó la música como cantante, acompañado en el acordeón por Neder Ramos.

En las redes sociales ha venido experimentando con su audiencia que ha venido conquistando con sus propias canciones, unas románticas y otras más alegres como ‘Un respiro a mi vida’.

Yimmy Durán nació en Cúcuta a pesar de que su papá era de Convención, Norte de Santander,  y en esta franja fronteriza ha querido continuar cantando música vallenata que, dice, heredó de su progenitor. Le dijo adiós a la caja, a la guacharaca y se lanzó como cantante y a pesar de la pandemia persisitirá en lo que más le gusta.

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