A partir de 2000, la Organización de Naciones Unidas proclamó el 18 de diciembre de cada año como el  Día Internacional del Migrante, puesto que desde ese momento empezaron a registrarse aumentos de los flujos migratorios en el mundo.

A la fecha, por ejemplo, las estimaciones consignadas en un informe sobre las migraciones en el planeta indican la existencia de 281 millones de migrantes internacionales, que es equivalente al 3,6%  de la población mundial en 2020.

Y aquí viene un dato revelador que merece el mayor estudio y consideración por todas las partes que tienen que ver con la atención de este problema humanitario, que ahora enfrenta Colombia como principal receptor y punto de paso de los venezolanos que salen del vecino país.

En este Día Internacional del Migrante quedó sonando lo expuesto por el Grupo Interagencial sobre Flujos Migratorios Mixtos y los representantes del Gobierno Nacional, en  la presentación del capítulo Colombia del Plan Regional de Respuesta para Refugiados y Migrantes.

Resulta que allí se habló que el año entrante se necesitarían 665 millones de dólares para atender a por lo menos 1.6 millones de personas de la población migrante, los colombianos que han retornado de Venezuela y las comunidades locales de acogida, en inversiones para cubrir sus necesidades de acceso a servicio básicos como alimentación, salud, vivienda y educación.

Esta cuantificación, que conlleva a una cifra enorme de los recursos que se requieren, indican que todavía es mucho lo que hace falta por hacer para cubrir a quienes han llegado a nuestras regiones en búsqueda de refugio y a organizar de nuevo sus vidas y para enfrentar los impactos que la recepción de este éxodo genera en departamentos y municipios.

Esta fecha nos sirve también para recordar que Migración Colombia maneja el dato sobre alrededor de 2.5 millones (que para ser más exactos es de 2’477.000) de ciudadanos de Venezuela que viven en nuestro país, que para hacernos una idea de punto de comparación, podemos decir que es como la población conjunta de los departamentos de La Guajira y Tolima.

Y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y de la Oficina Internacional de Migración (OIM) reportaron que hasta  noviembre de 2022 un total de 7’134.132 migrantes venezolanos habían llegado a varios países, de los cuales el 34,72% están en Colombia.

Otra cifra de relevancia, es que el Permiso por Protección Temporal (PPT) ya les fue aprobado a 1’632.817 venezolanos en nuestro país, asunto que va en la dirección para incluir a estas personas dentro de los programas y políticas de diversa índole permitiéndoles acceder a servicios esenciales y tener la posibilidad de obtener empleo formal, entre otros.

Precisamente, el papa Francisco ha pedido construir el futuro con los migrantes y los refugiados, al precisar que construir con “significa,  ante todo,  reconocer y promover la aportación de los migrantes y los refugiados a esta obra de construcción, porque sólo así se podrá edificar un mundo que garantice las condiciones para el desarrollo humano integral de todos y todas”.

A su turno, Caritas Internationalis instó a los gobiernos y a otros actores internacionales a promover la plena inclusión de los migrantes y refugiados, reconociendo y apoyando su papel clave en la construcción de comunidades fraternas e inclusivas dentro de nuestra sociedad. 

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