En plena reactivación de la economía hacer mercado se ha vuelto más difícil para muchos colombianos, quienes ven cómo los productos están a un precio más elevado al que acostumbraban a pagar.

Tanto en Colombia como a nivel mundial el costo de vida se ha disparado. En parte, el fenómeno corresponde a un coletazo de las estrictas restricciones de la pandemia, que hicieron parar la producción para luego tener que activarla, dicen los expertos.

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Por tanto, la inflación, como técnicamente se le llama al costo de vida, se ubicó en 5,26 % anual a noviembre, según reportó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), en la presentación en días pasados del Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El indicador fue impulsado principalmente por los alimentos, elevando así un 14,85 % su precio en lo corrido del año, su nivel más alto desde 2016, cuando se reportó una inflación de alimentos de 11,1 % como resultado del paro camionero.

En la canasta básica familiar productos como la carne de res están entre los que más se han encarecido: subió un 30,6 % en lo corrido del año. El cerdo subió un 26,83 %, y las aves un 26,2 %.

“El aceite, los lácteos y las carnes están teniendo un incremento serio”, sostiene el presidente de la Asociación Colombiana de la Industria Gastronómica (Acodres), Guillermo Henrique Gómez París.  “En estos momentos estamos pagando unos altos precios por la carne de cerdo. El pan también se encareció”, dice.

Las razones 

“Como todo el año pasado fue más barato, sobre todo en el sector agrícola, evidentemente causó un fenómeno medianamente inevitable y es que al nivelarse los precios causa un fenómeno de inflación”, señala Camilo Herrera, economista y fundador de Raddar.  

Además de la pandemia del coronavirus, hay una serie de factores que están afectando el costo de los alimentos que suben a diario.

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“Tenemos unos efectos que son de rebote y bajada del precio del año pasado, unos efectos por los mayores precios de los insumos para la producción de alimentos y unos efectos por la menor capacidad de producción que tiene el sector agrícola ante las menores siembras y recolección del año pasado”, enfatizó Herrera, quien desde Raddar, hace doce años, consolida todos los meses el comportamiento del gasto de los hogares en las principales ciudades de Colombia.

Así, otra de las razones principales por la que los alimentos están subiendo de precio es el alto valor de los insumos para la producción. Según ha dicho la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), el precio de los insumos puede elevar los costos de producción hasta 70 %, dependiendo del sector.

Por ejemplo, en el sector avícola, en lo corrido del año, ha habido un aumento del 28,5 % en los insumos como son el alimento balanceado (maíz, soya y torta de soya).  En Colombia, el costo para producir pollo y huevo es 80 % de este tipo de insumo, según el presidente de la Federación Nacional de Avicultores (Fenavi), Gonzalo Moreno.

Para el profesor de la facultad de economía de la Universidad del Rosario, Mauricio Rodríguez, los insumos del sector agrícola y, “en particular, los fertilizantes se han trepado de precio, por un lado, porque la oferta ha estado por debajo de lo que necesita la demanda mundial”.

Pero el aumento de la demanda y la poca oferta a nivel mundial por la reactivación económica no son las únicas razones que explican la escasez de insumos en el país. La dependencia importadora de Colombia para adquirir agro insumos, y que en este momento está afectada por la crisis mundial logística, también explicaría los elevados precios a los que se consiguen algunos alimentos.

“A eso le pueden sumar entonces también la subida del precio del dólar, que se va a ver reflejada en todo esos agro insumos importados”, explica el economista de la universidad del Rosario.

Crisis en los puertos del mundo 

Para entender el impacto de la escasez generalizada de contenedores en todo el mundo, el presidente de Fenavi explica el aumento de las tarifas para importar insumos para el sector avícola en el país.

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“Ha habido un aumento considerable de los fletes de todos los nutrientes que traemos de China. Un contenedor traerlo valía antes 1.800 dólares, ahora vale entre 14.000 y 160.000 dólares”, dice Gonzalo Moreno.

“También el alimento balanceado del maíz y la soya, que viene importado en su mayoría, ha aumentado el costo de transporte por tonelada de 20 a 50 dólares”, explica.  

Y una vez llegan al país, el territorio nacional también se han aumentado los fletes. Según señala el presidente de Fenavi, desde la costa norte hasta el centro del país se han aumentado los precios en un 130 % en lo corrido del año. Y desde el puerto de Buenaventura hasta el centro del país se ha dado un aumento, más o menos, del 34 %.

De manera que se ha dado un aumento al precio del pollo este año del 24,8 % y en el caso del huevo de 13,7 % en lo corrido del año, según el Índice de Precio al Consumidor del Dane.

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