Lunes, 6 de Octubre de 2014
~
Cuatro minas antipersonal habrían sido instaladas en un
parque infantil cercano a una escuela del corregimiento de San Andrés de
Pisimbalá, Inzá, Cauca.~

Cuatro minas antipersonal habrían sido instaladas en un parque infantil cercano a una escuela del corregimiento de San Andrés de Pisimbalá, Inzá, Cauca.
Según informó el alcalde de Inzá, Mauricio Castillo, habitantes del corregimiento dieron aviso a las autoridades luego de que vieran los cuatro elementos con cables en el parque infantil.
"Aún no tenemos certeza de qué es lo que hay en ese lugar porque estamos esperando a que el Ejército revise la zona. Por lo que se ve, si serían minas, pero eso lo determinará el Ejército", dijo Castillo, quien informó además que, gracias a la semana de receso, se pudo evitar una tragedia con alguno de los menores de la escuela.
De acuerdo con el Ejército, las minas habrían sido sembradas por el Sexto Frente de las Farc. En la mañana de este lunes, un grupo especial de antiexplosivos del Ejército se movilizó hacia la zona de las minas con extrema precaución, pues se teme que el campo sea una trampa para emboscar a los uniformados.


Cuatro minas antipersonal habrían sido instaladas en un parque infantil cercano a una escuela del corregimiento de San Andrés de Pisimbalá, Inzá, Cauca.
Según informó el alcalde de Inzá, Mauricio Castillo, habitantes del corregimiento dieron aviso a las autoridades luego de que vieran los cuatro elementos con cables en el parque infantil.
"Aún no tenemos certeza de qué es lo que hay en ese lugar porque estamos esperando a que el Ejército revise la zona. Por lo que se ve, si serían minas, pero eso lo determinará el Ejército", dijo Castillo, quien informó además que, gracias a la semana de receso, se pudo evitar una tragedia con alguno de los menores de la escuela.
De acuerdo con el Ejército, las minas habrían sido sembradas por el Sexto Frente de las Farc. En la mañana de este lunes, un grupo especial de antiexplosivos del Ejército se movilizó hacia la zona de las minas con extrema precaución, pues se teme que el campo sea una trampa para emboscar a los uniformados.