Un acuerdo con el comité de Derechos Humanos del Complejo Carcelario y Penitenciario de Cúcuta detuvo la protesta que los presos tenían programada para este lunes, en demanda del cumplimiento de los derechos que tienen como población privada de su libertad.

A través de un comunicado el comité expresó que llegaron a un acuerdo con la directiva de la cárcel Modelo que, por el momento, dejó sin efecto un plantón que se había programado a las afueras del recinto por parte de familiares con un cacerolazo desde la comunidad reclusa.

En el escrito los líderes informaron que la administración de la cárcel se comprometió a levantar las restricciones de  visitas de alto riesgo, con respecto al ingreso de menores de edad, mayores de 60 años y mujeres en embarazo.

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También, se acordaron la adquisición y puesta en marcha de una nueva caldera para la preparación de alimentos y a programar una reunión con los jueces de ejecución de penas y medidas de seguridad en Cúcuta.  “llegando a este acuerdo, desistimos de la realización del plantón y demás actividades de protesta que se tenía programa para el día de hoy lunes del 2022”, dice el escrito que firma el Comité de Derechos Humanos de la cárcel de Cúcuta. 

Carlos Ramos, abogado y director de la Red Departamental de Derechos Humanos, dijo que la deuda que la Unidad de Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec), con el consorcio que presta los servicios de alimentación a la cárcel Modelo de Cúcuta asciende a los $42.000 millones de pesos.

Explicó que esta situación a la cual no se ha dado plena solución, se agravó cuando en días pasados se dañó la caldera en la que se preparaban los alimentos de unos 3.600 presos, aunque aclaró que en ningún momento se ha suspendido el suministro de la comida a los internos.
 

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