Veolia construirá el parque tecnológico ambiental Chocoa en zona rural de Girón, que dará solución a una problemática de tipo ambiental y a la emergencia que vive Santander desde hace 15 años para la disposición final de sus basuras.

El Carrasco es en la actualidad el único sitio que recibe las más de 1.000 toneladas diarias de residuos sólidos que producen 17 municipios, incluido Bucaramanga, sin embargo sobre ese relleno sanitario  pesa una orden de cierre del 19 de diciembre de 2019 por parte del Juzgado 15 Administrativo Local, por lo que está funcionando provisionalmente para  generar unos muros de contención con los mismos residuos que llegan. 

Esta es una buena noticia para Cúcuta, a criterio de Ismaris Ortiz González, gerente regional Veolia Aseo Santander y Cesar, explicando que la materialización de esta obra aleja la posibilidad de hacer la disposición final de los residuos sólidos del área metropolitana de Bucaramanga en el parque tecnológico ambiental Guayabal, barajado como alternativa de contingencia.

“Creemos que con esta solución que Veolia está brindándole a la comunidad de Santander, se elimina cualquier alternativa de llevar esos residuos a una distancia tan larga como Cúcuta, y a la vez es un alivio para los usuarios porque no tendrían que pagar los altos costos que generaría una operación de esa naturaleza”.

La gerente dijo que la obra beneficiaría a 17 municipios de Santander que concentran más de un millón y medio de personas, quienes hoy están clamando por una solución pronta y definitiva. 

El parque tecnológico está diseñado para más de 30 años de vida útil, dependiendo de la capacidad de recepción de residuos, un proyecto que requiere una inversión alta que en este caso superaría los $25.000 millones en sus fases iniciales de la puesta en marcha.

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Ismaris Ortiz explicó que el proyecto cuenta con licencia ambiental expedida por la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB), la autoridad ambiental del departamento, expedida en 2011.

Veolia adquirió el predio con base en la experiencia por tener 11 parques tecnológicos ambientales en Colombia, 30 parques en Latinoamérica y 150 a nivel global, y viendo la necesidad que hay en la región de una solución real y rápida impulsó la puesta en marcha del proyecto este año, según la ejecutiva.  

El parque quedará en Girón, vereda Chocoa,  a 20 kilómetros del casco urbano, en el corredor turístico que conecta esa localidad con Zapatoca,  con un área de 1.060 hectáreas, de las cuales 30 hectáreas son  las áreas licenciadas, 100 hectáreas constituirán el parque en su integralidad, mientras que las restantes serán de reserva natural.  

La primera fase incluye el alistamiento de las celdas que se requieren para  mitigar los efectos de la emergencia sanitaria, que estaría lista en seis meses, con capacidad para recibir la misma cantidad de residuos que hoy llegan a El Carrasco, que son 31.000 toneladas al mes.

Las dos fases siguientes estarían terminadas en un período máximo de tres años,  para que quede operando el parque de manera integral, porque no será solo un sitio para disposición final de residuos, sino que tendrá tres elementos fundamentales, el primero la parte técnica y tecnológica alineada a la reglamentación legal.

La segunda fase contempla la inclusión de varios sistemas de gestión y valorización de residuos, es decir sistemas de aprovechamiento: residuos inorgánicos con material reciclable para que mediante un proceso de gestión  se vuelvan a incorporar en la cadena de valor para la elaboración de nuevos productos; planta de compostaje y lombricultivo para la generación de abono mediante residuos orgánicos; planta de recepción y transformación de Residuo de Construcción y Demolición (RCD), o escombro limpio, que será aprovechado para la elaboración de bloques y adoquines, y una planta de captación de biogás que será valorizado para convertirlo en energía.

La tercera es hacer del parque una integración al entorno natural y social. Se tiene una extensión de 900 hectáreas que serían de aislamiento y de preservación de todo el entorno que rodea el proyecto, con senderos ecológicos para que las familias, visitantes y propios hagan recorridos por toda esa área mediante el concepto de turismo ecológico, puntualizó Ismaris Ortiz.